TPtese a la tranquilidad retirada en que me hallo no me queda más remedio que leer las noticias. Mi naturaleza impertinente no es capaz de mantenerme, ni en verano ni en vacaciones, a salvo y aunque por un lado me atrae permanecer en este puntito ataráxico, a la vez --y no sé muy bien por qué-- me siento culpable. Así que mantengo cierta unión con la actualidad. Esa que, por otro lado no es sino repetición cansina de desgracias, violencias, maldades, locuras e insensateces. Acá la catástrofe asoma en nombre de Ebola, mientras rumores y certezas la sitúan ya en Alicante ya en Bilbao. Allá Siria se convulsiona ensangrentada y olvidada. Los alto el fuego sin contenido se suceden en un Oriente más próximo y en donde creíamos el racismo atajado para siempre, renacen brotes de odio que demuestran ¡otra vez! que el hombre es una criatura cruel capaz de seguir aniquilándose no ya por una idea --que también es disparate-- sino por un tono distinto de piel. La naturaleza nuestra vuelve una y otra vez a los mismos dislates, a veces con exactos protagonistas a veces con actores diferentes pero idénticos en un punto inacabable del exasperante retorno.

El amable kioskero al que he comprado el periódico me ha aconsejado que me tome unas cañas y me baje a la playa, porque "esto", señalando a la prensa, es un horror. Sin embargo me lo llevo para comprobar que mientras el sol ciego se refleja en este mar azul de cielo y blanco de espuma, en un agosto que quisiera eterno, septiembre espera agazapado con más Mas y más Oriol . Autistas ellos y aislados de lo que verdad importa continúan a la gresca sin reposo. Junqueras exasperado sin descansar ni en fin de semana invoca las alturas grandilocuentes a la par que ridículas de su "sed de justicia y hambre de libertad" y exhorta a sacar las urnas a la calle en noviembre, que ya no se puede aguantar más ¡por Dios! este yugo españolazo.

Yo estoy por recomendarle que se tome unas cañas, como mi kioskero, pero recapacito, porque a su envergadura y enfado mejor le vendrá una tila alpina. Con sacarina.