TAt su paso por Madrid, Josu Jon Imaz , presidente del PNV, ha dejado en el aire una idea llamada a envenenar los sueños de Rodríguez Zapatero . Ha dicho que si el PP gana las elecciones, no descarta la posibilidad de pactar con Rajoy . Es una bengala en la noche. Una luz que se extinguirá en dos días así que empiecen a amarillear los periódicos de mañana, pero ha iluminado un escenario que llevaba en sombras desde los tiempos en los que Aznar confundió la mayoría absoluta con el mando de una división panzer .
También nos está diciendo que el dirigente vasco dispone de alguna encuesta en la que el PP se aproxima mucho a un PSOE tocado por el caso De Juana , el lío de las listas de Batasuna y el Estatut . Imaz habla con frecuencia con Rodríguez Zapatero y respecto de los Otegi y demás batasunos mantiene un discurso mucho más distante y claro que el del presidente del Gobierno, siempre tan recosido de anfibologías.
Es un personaje viajado y eso ayuda a ensanchar el horizonte vital. A veces cuesta reconocer que sus palabras remitan a la misma doctrina cerrada, excluyente y sofocante a la que nos tienen acostumbrados otros dirigentes nacionalistas vascos como el lehendakari Ibarretxe . Está claro que Imaz es un personaje de peso a tener en cuenta para salir del atolladero en el que nos ha metido el dichoso proceso que nació de una de las famosas intuiciones del señor Rodríguez Zapatero. A su paso por Madrid ha dicho cosas que hacen pensar que no es instrumento de nadie. Tengo para mí que a Imaz no se la darán con queso como ocurrió con Artur Mas . Por decirlo en corto: creo que tiene las ideas claras.
*Periodista
