Se siente identificado con Tomás Gómez y, sobre todo, Juan Antonio Alvarez Fernández, el que fuera número 2 de Elia Blanco en las elecciones del 2003, comparte su filosofía: "Demos la voz a los militantes, que elijan ellos y tengan opciones. No sé lo que el partido tendrá pensado, pero quiero que los militantes elijan, no el partido porque hay mucha gente válida en el PSOE, con proyectos e ideas".

Precisamente, recuerda que su candidatura a candidato se ha forjado entre un grupo "numeroso" de militantes, entre los que "ha ido surgiendo una opinión de alternativa que ha derivado en que los compañeros me hayan pedido que encabezara el proyecto y se generara debate y democracia", afirma.

Dice contar ya con los avales necesarios (60 firmas para un total de 300 militantes), pero quiere seguir recogiendo firmas para contar con el apoyo del máximo número de militantes. "Independientemente de que haya una lista o más, quiero ir avalado por los militantes".

Además, defiende unas primarias que, como recuerda, introdujo Zapatero en el partido y "en su momento, le apoyé por introducir ese proceso de democracia interna".

Por otro lado, desliga su candidatura al proceso judicial que afecta a algunos concejales del PSOE porque "no me implica ni me afecta, es un accidente del que el partido tiene que sobreponerse y dar la cara".