Casi el 30 por ciento del consumo anual de agua potable en Plasencia se lo lleva un solo abonado y es el ayuntamiento. Pero no sólo por la cantidad de servicios municipales que hay que atender o el riego de parques y jardines, sino también por la fuga de agua en unas instalaciones que urgen su revisión. Por lo que la nueva concesionaria del servicio tendrá que realizar mejoras varias por valor de 4,2 millones de euros en cinco años, según el pliego de condiciones elaborado por iniciativa de la concejala de Servicios Municipales, Carmen Blázquez.

Su intención es llevarlo ya a un pleno extraordinario este mes y adjudicar el servicio del agua por quince años a una de las cuatro ofertas presentadas, en su mayoría, por uniones temporales de empresa. La propia edil reconoce que desde la impermeabilización de los depósitos para evitar fugas al mínimo control de las fuentes o las rotondas que pierden agua pueden contribuir a su ahorro. De los aproximadamente 2.660.000 metros cúbicos facturados el 2005, cerca de 737.000 corresponden al ayuntamiento, un 28%.

Además de las fugas y la antigüedad de las redes, la reposición del vaso de la depuradora que dejó de funcionar cuando se produjo la riada de Badajoz en 1997 está entre las obras más urgentes que tendrá que acometer la nueva empresa que centralizará, por primera vez, toda la gestión del agua así como también la limpieza de las redes de alcantarillado.