Cuando un niño tiene que permanecer en su casa por un tiempo superior a un mes y no puede por tanto asistir regularmente a un centro educativo, la Junta tiene establecidas unas ayudas «destinadas al alumnado con necesidades educativas específicas de apoyo educativo, escolarizados en centros docentes sostenidos con fondos públicos de Extremadura».

Otra cuestión es cuándo se reciben esas ayudas. Una familia placentina, con un niño de 9 años diagnosticado de un cáncer, cree que tardan en llegar y ha decidido denunciarlo públicamente porque «no es justo que haya que adelantar el dinero si la educación es gratuita».

Esta familia es consciente de que, cuando termine el plazo fijado, la Junta pagará el apoyo educativo que ahora reciben a través de un profesor particular, pero se pregunta «qué va a hacer la familia que no tenga recursos económicos para pagar, con el paro que hay ahora y los sueldos bajos que cobran quienes trabajan».

En su caso, son un matrimonio con un total de cuatro hijos y solo el padre trabaja. Tras los primeros meses de pruebas y tratamientos al detectarle el cáncer, contrataron a un profesor particular «de una academia, porque tiene que estar dado de alta, no sirve cualquiera». El profesor acude a su domicilio seis horas a la semana y cobra un sueldo de 350 euros mensuales.

La orden de ayudas educativas de la Junta se publicó en el Diario Oficial de Extremadura el 6 se octubre del 2016 y la familia entregó toda la documentación para solicitarla el 16 de diciembre.

Actualmente, todavía no ha recibido contestación -sí de un error que subsanó- y el profesor lleva contratado desde mediados de enero. Según la orden publicada, «el plazo máximo para resolver el procedimiento y notificar la resolución será de seis meses desde la fecha en que la solicitud del interesado tuvo entrada en el registro correspondiente». Es un plazo que considera excesivo porque «nosotros podemos pagarlo, pero y quien no pueda. Sabemos que al final te lo van a pagar, pero tener que adelantar el dinero no es justo».

Por oro lado, la misma orden de la Consejería de Educación señala que, en estos casos, «la cuantía de la ayuda será de 300 euros por cada mes completo», lo que no le permitiría sufragar el coste íntegro del profesor. Y todo, insiste, cuando «la educación es gratuita y existe la obligación de tener al niño escolarizado». Por todo, reclama mayor agilidad en la revisión de las solicitudes y la concesión de las ayudas.