Los cuatro detenidos tras amenazar al empleado de la gasolinera han sido puestos en libertad provisional con cargos y tendrán que comparecer los lunes y los miércoles de cada semana en el juzgado en espera del juicio por decisión del titular del juzgado número uno que ha instruido las diligencias previas. Tres de los imputados proceden de Puerto de Santa María y un cuarto de un municipio de la provincia.

El juez ha visto indicios de delito en las amenazas que profirieron la madrugada del domingo contra el empleado, que según la investigación en marcha se habría visto envuelto en un ajuste de cuentas por tráfico de drogas con un familiar suyo, del que el hombre está totalmente ajeno. Cuando le amenazaron estaba protegido por el cristal y luego los detuvo la policía.