Una simple gripe segó el domingo la vida de Marlene, que con 21 años no pudo con una enfermedad que a los jóvenes del otro lado del mundo les basta con guardar cama unos días. Pero Marlene nació en un barrio marginal de Lima y la diabetes la dejó sin defensas. Es un caso entre tantos que se convirtió para los placentinos en un símbolo por la labor altruista del Movimiento Inquietud de la parroquia de San Pedro, que consiguió recaudar 1.800 euros con los que Marlene acababa de recibir las primeras hemodiálisis de su vida.

La noticia de su muerte ha sido un mazazo para los jóvenes del Movimiento Inquietud, especialmente para Henar y Mercedes Louzado, Alejandro Orantos y Elena Burgos, los cooperantes placentinos que acudieron al barrio de Ancieta Alta con afán solidario. Les queda el consuelo de saber que "Marlene recobró la esperanza de curarse los últimos meses y decía que estaba inmensamente agradecida a los placentinos", relató ayer una desanimada Henar Louzado, quien no olvidó agradecer su solidaridad a quienes sufragaron las sesiones de hemodiálisis.

La repentina muerte de Marlene sucedió apenas dos días después de que el Movimiento Inquietud celebrara su primera Gala Solidaria a beneficio precisamente suyo llegando a recaudar 600 euros que ahora tendrán que tener otro destino.

OTROS PROYECTOS

La gala solidaria reunió al Coro de Cámara Ars Nova, el grupo de amigos del Folklore Chispa, al grupo de teatro de la Universidad de Extremadura, al coro Magnificat y a un grupo de comunión. La cinta solidaria, la segunda San Silvestre y un maratón radiofónico son otras de sus actividades benéficas.