La undécima marcha de la piruleta del Club Valcorchero cosechó este fin de semana otro éxito con la participación de cientos de niños acompañados por sus padres, que emplearon la tarde del sábado en una caminata desde el parque de los Pinos hasta la residencia y de ahí a los depósitos del Puerto para dar marcha atrás con nuevo itinerario a consecuencia de las obras en el camino viejo.
Aunque cuenta con todos los parabienes administrativos, no tanto con los de estos paseantes que echan de menos el camino viejo del Puerto y que tuvieron que poner fin a la marcha en la residencia y no en La Data. Esta es una de las actividades que nació a la par que el propio club Valcorchero en el año 1991, que entonces contaba con apenas cuarenta socios y ya pasa del centenar. Recibió el nombre de la piruleta porque estas y otras golosinas se les entrega a los niños que participan en una actividad al aire libre en la que aprender a vivir con la naturaleza.
