La Policía Nacional detuvo el lunes por la tarde a otro individuo sospechoso de participar en los robos de las bombonas de butano que luego se venden ilegalmente en los barrios de Gabriel y Galán y San Lázaro, principalmente.

El seguimiento policial ha hecho posible la quinta detención por estos hechos desde mediados de marzo, cuando los tres primeros arrestados acabaron en prisión provisional sin fianza como presuntos responsables del robo de al menos dos mil bombonas del interior del almacén de la distribuidora de Repsol.

El trasfondo de estos robos es todo un mercado negro de botellas de butano que la propia compañía distribuidora ha tenido que ir recogiendo por los descampados una vez vacías. Para la empresa ha llegado a suponer pérdidas de hasta 36.000 euros en robos casi diarios, por lo que la policía mantiene una estrecha vigilancia para poner freno al tráfico ilegal de la mercancía. De la misma manera que está investigando dónde pueden estar comprando el cobre procedente de los continuos robos de cables del alumbrado público.