Agentes de la policía local frustraron, en la madrugada de ayer, que se cometiese un robo en una vivienda gracias a la llamada de una vecina, que escuchó ruidos en la casa. El suceso se produjo a las 00.30 horas en el interior de una vivienda de la calle Santa María, en la que en esos momentos no había nadie y donde el ladrón, de 40 años y que responde a las iniciales E. S. G., fue detenido. Según informó ayer la policía, los agentes acudieron al lugar tras avisarles la vecina por teléfono. Al llegar, observaron la puerta de la casa abierta y en el interior localizaron al hombre cuando intentaba robar. La policía ha instruido diligencias.