Los cambios de circulación en las zonas de San Pedro y Santa Ana que ha provocado el inicio de la obra de mejora del pavimento de la calle del Sol cogieron ayer por sorpresa a vecinos y conductores. La queja fue unánime porque a pesar de tratarse de una obra largamente anunciada no se haya avisado con la misma anticipación el desvío del tráfico, provocando así el caos circulatorio.

Por este motivo, muchos se desorientaron al toparse con las señales de prohibido el paso al tiempo que insistieron en que "es increible que no hayan mandado a un guardia para avisar de los cambios, se han limitado a poner las vallas y ya está".

EN SAN PEDRO Y SANTA ANA

Así, lo más habitual ayer fue ver a los conductores dar marcha atrás con sus vehículos ante la imposibilidad de acceder a la calle San Pedro, mientras las furgonetas y los turismos de mayores dimensiones tenían problemas para girar hacia la calle Clavero (por la presencia de pivotes de piedra) y de ahí a la calle Maldonado. Para evitar estas dificultades, hubo quien prefirió circular por dirección prohibida para salir de nuevo a la calle Talavera.

Por lo que respecta a la zona de Santa Ana, las principales protestas llegaron de la asociación de vecinos de la plaza de la Torre Lucía debido a la decisión de desviar el tráfico por la recién estrenada plaza. El presidente vecinal, Jesús Guijo, señaló que "no me parece lo más idóneo, es una locura que metan por aquí el tráfico porque esta plaza está para que pase el mínimo rodado". Aún así, ni siquiera se ha señalizado la posibilidad de tomar esa dirección y el presidente se enteró al ver la inusual afluencia de vehículos.