La concejala del grupo mixto, Raquel Puertas, ha desistido de la decisión tomada por la junta local de gobierno de llevar a José Luis Díaz al fiscal porque fue su empresa familiar y no el ayuntamiento la que pagó su Seguridad Social cuando fue alcalde, pero no ha logrado disuadir a sus socios de gobierno porque la alcaldesa le ha asegurado que seguirá adelante.

Pero Elia Blanco lo hará ahora sin el apoyo de la edil tránsfuga del CCPL, que dice haberlo reconsiderado para evitar el clima de crispación y porque "no toca desenterrar ahora un asunto de 1997 cuando el Tribunal de Cuentas dijo que era una irregularidad administrativa que creo que al ayuntamiento no le perjudicó". Aunque dijo que a Díaz sí: "El fue el beneficiario, pero es un problema de conciencia y no un deliito".