La mayoría de los ciudadanos han acogido con moderado optimismo el funcionamiento de las escaleras mecánicas. La obra estrella del segundo Plan E, que dedicó más de un millón de euros en la construcción de unas escaleras que unen la avenida del Valle con la Puerta del Sol, ha tenido --desde que se anunciara el proyecto en enero de 2010-- sus defensores y detractores.

La mayoría de los ciudadanos consultados por este periódico coincidieron en señalar que la obra resulta beneficiosa para una gran parte de la población, pero se preguntan, cuánto tiempo durarán sin averiarse. "Incluso con un buen mantenimiento, va a ser normal encontrarnos con las escaleras paradas en algún momento" --señaló uno de los encuestados-- "ya que el promedio de desperfectos en este tipo de instalaciones es muy elevado". De hecho, ayer, a las 14.15 horas uno de los tramos de ascenso estaba parado, mientras el resto de la instalación funcionaba con normalidad. Otros usuarios también se han quejado de que las rampas de acceso a la instalación se quedan paradas con frecuencia.

Los que parece han salido más beneficiados por esta obra han sido los mayores. Los ancianos que ayer utilizaban las escaleras se mostraban encantados con esta instalación, que es pionera en Extremadura. La mayoría de ellos reconocieron que nunca accedían al centro de la ciudad por la antigua escalinata de Leonor de Plantagenet, sino que daban la vuelta hasta la puerta Talavera, para llegar a la plaza Mayor.

El hecho de que se proyecte construir un parking de pago en las huertas de La Isla también supone una buena forma de concebir el acceso a la zona centro, según la mayoría de usuarios consultados, que coincidieron en señalar que se trata de un elemento de comunicación "rápido, práctico y accesible". Accesible, excepto para los usuarios que utilicen silla de ruedas. La Asociación de Minusválidos de Plasencia presentó un recurso por discriminación.