Pocas empresas tienen más ensuciada su imagen hoy que BP, responsable del desastroso vertido de crudo en aguas del golfo de México. Y quienes denuncian las actitudes de engaño y desinformación que han dominado la actuación de la petrolera británica desde que la catástrofe arrancó el 20 de abril han sumado un argumento más a su causa: BP ha reconocido que un fotógrafo de la compañía alteró con el programa informático Photoshop una imagen del centro de mando de Houston desde el que la empresa coordina la respuesta de emergencia para dar apariencia de más actividad en esas instalaciones.

BP no ha ofrecido voluntariamente la información, sino que se ha visto obligada a hacerlo después de que un blog, Americablog.com, identificara el lunes la foto trucada. Tanto la agencia Associated Press como diarios como The Washington Post recogieron esa información, y solo entonces BP retiró la imagen, que había estado desplegada de forma visible en su propia web.

PRACTICAS Scott Dean, uno de los portavoces de la petrolera, trató de justificar lo ocurrido explicando que un fotógrafo quería practicar con photoshop, un programa que habitualmente usan para ediciones usuales como correciones de color, cortes y eliminación de brillos. El empleado tomó una imagen en que se ve a tres trabajadores ante una decena de pantallas de televisión que emiten las imágenes del golfo y, en tres de las pantallas que aparecían en blanco, pegó imágenes para que pareciera que también retransmitían actividad.

Las justificaciones no han convencido del todo y Americablog.com sigue denunciando, por ejemplo, que BP no ha ofrecido la foto original en alta definición, que permitiría identificar cuándo se tomó, pues unos datos apuntan a que no es actual sino del 2001.

PROTESTAS No es este el único episodio que saca los colores a BP, una empresa que se ha granjeado críticas mundiales, que ayer llegaron, por ejemplo, a las puertas del Ministerio de Economía alemán, ante el que activistas de Greenpeace organizaron una protesta. Un diario de Alabama, el Press-Register ha publicado una información en la que se denuncia que la petrolera ha intentado contratar a prominentes científicos de una universidad estatal, tratando de atraerles con sustanciosos salarios y primas, para sumar su análisis a su defensa ante la incipiente oleada de demandas.

Asimismo, el martes resurgieron en una sesión de investigación informaciones que vuelven a apuntar a que BP era consciente de los riesgos antes del accidente pues Halliburton, la empresa subcontratada para realizar los trabajos de cementación del pozo, avisó el 18 de abril de que podría tener un problema grave de escapes de gas natural. Los abogados de BP se han defendido recurriendo a un correo electrónico enviado el mismo día 20 por un empleado de Halliburton en el que se decía que se había completado el trabajo y se añadía: "Todo ha ido bien".