La rotura de una vigas de 100 toneladas de las obras de cobertura del ferrocarril en Zaragoza sobre el tendido de alta velocidad afectó ayer al sistema de electrificación de las líneas y obligó a desviar por líneas alternativas los trenes que atraviesan la ciudad, que circularon con un retraso de entre 30 y 40 minutos.

El suceso, cuyas razones se desconocen, se produjo a las tres y media de la madrugada, según explicaron fuentes de Renfe y el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif). A esa hora, se produjo la "rotura fortuita" de una de las vigas que formaban parte del cubrimiento que el consorcio Zaragoza Alta Velocidad efectúa en la salida de la capital aragonesa en dirección a Miraflores. El suceso, que no produjo daños personales, afectó al sistema de electrificación de las líneas de ancho ibérico y de ancho internacional.

Al lugar se desplazaron equipos de mantenimiento de Adif y dos grúas de grandes dimensiones con el fin de proceder a la retirada de la viga y a la reparación de los daños causados. Fuentes de Renfe explicaron que el servicio, con toda probabilidad, quedaría restablecido a última hora de la noche.