La recogida de firmas y el reparto de folletos en contra de la eutanasia promovido por la Conferencia Episcopal Española fue minoritaria ayer en España, fundamentalmente porque no se pudo completar la distribución de los impresos. Lo que parece seguro es que la CEE proseguirá con la campaña.

Está previsto que se repartan unos 7,5 millones de impresos escritos en castellano, catalán, gallego y euskera. En el documento, titulado Toda una vida para ser vivida , se habla de la eutanasia como "una forma de homicidio" y se tacha de algo "inmoral y antisocial".

REFORMAS SOCIALES La Conferencia Episcopal Española (CEE) ha iniciado una campaña informativa contra las reformas sociales --aborto, matrimonio entre homosexuales y eliminar la clase de Religión en las escuelas-- que impulsa el Gobierno socialista. No obstante, el Ejecutivo no ha anunciado medida alguna sobre la eutanasia.

Según Fernando Perales, párroco de la iglesia de Sant Ot de Barcelona, los obispos de Cataluña tienen "libertad" para decidir si reparten el documento. En su opinión, el folleto es informativo "porque la CEE no tiene jurisdicción sobre cada obispado --dijo Perales a Europa Press--, por lo que es cada obispo quien toma la decisión sobre lo que hace", informa Jordi Subirana.

Por su parte, el portavoz del Partido Popular en la Comisión de Sanidad del Congreso, Mario Mingo, calificó de "muy positiva" la campaña contra la eutanasia puesta en marcha por la Iglesia ya que con ella "toma conciencia ante un hecho que está de actualidad en la sociedad española". Además, insistió que el PP tiene las ideas "bastante claras en esta materia, y que en este caso coinciden con las de la Iglesia", informa Europa Press.

"SE ESTA EQUIVOCANDO Por otra parte, el coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, aseguró ayer que la Iglesia se "está equivocando de medio a medio" con su campaña contra la eutanasia y le acusó de "deslegitimar el sistema político y las decisiones democráticas", así como de "recuperar el nacional catolicismo donde pueda imponer su moral individual a la moral social".

El obispo de San Sebastián, Juan María Uriarte, expresó su "enérgica" defensa del matrimonio entre un hombre y una mujer y manifestó su compromiso de mantener este mensaje en la diócesis donostiarra "aunque no le alegre los oídos a algunos".

Uriarte, que presidió en la catedral del Buen Pastor de San Sebastián una eucaristía con la que su diócesis cierra una semana dedicada a la familia, subrayó que la Iglesia es "netamente partidaria" de un acto "público" de unión matrimonial entre un hombre y una mujer que doten a la unidad familiar de un carácter "perpetuo y fiel".