La madre del torero Jesulín de Ubrique, Carmen Bazán, ha testificado hoy en la Audiencia Nacional en el juicio a seis presuntos islamistas acusados de cometer una serie de robos en Andalucía, uno de ellos en la finca Ambiciones, para financiar a un grupo terrorista argelino.

Bazán, que ha acudido acompañada de su hijo Víctor Janeiro, ha sido citada como testigo porque uno de los robos supuestamente cometidos por este grupo se produjo en la finca Ambiciones, que su familia tiene en la localidad gaditana de Ubrique.

UNA CRUZ

La madre del diestro ha confirmado que el 6 de marzo del 2005 varios individuos accedieron a la finca, tras romper el cristal de una puerta, y se llevaron diversos objetos y joyas.

Carmen Bazán ha explicado que recuperó parte de los objetos robados, entre ellos una cruz que ha reconocido como suya, aunque ha admitido que "podía haber muchas iguales" ya que era "una joya completamente normal", que no estaba grabada ni tenía ninguna señal especial.

En el juicio, que ha continuado con otras declaraciones de testigos y peritos, se juzga a seis acusados de colaborar con la financiación, mediante una serie de robos, del Grupo Salafista para la Predicación y el Combate (GSPC), una organización terrorista de corte islamista radical.