David Marqués, el hermano mayor de Marc, el niño secuestrado durante unas horas en Begur iba ayer por la mañana con su esposa Beth cargado de diarios. "La familia está bien y Marc también, parece como si no hubiera pasado nada", dijo con cara de alivio y añadió: "Es muy pequeño y la policía y los médicos creen que no tendrá secuelas".

David rememoraba ayer que la familia pasó una de las peores noches de su vida. No es para menos. Una vez que se localizó al pequeño en el interior del coche que los cinco atracadores abandonaron en Fontanilles, la pregunta que estaba en boca de todos era si esta dura experiencia dejaría secuelas al pequeño. "Lo sacaron de la cama y se lo llevaron en pijama porque cuando entraron en casa estaba durmiendo. Prácticamente no se enteró de nada".