Un matrimonio formado por C.F.G., y A.J.G.B., y uno de sus tres hijos, M.F.G., de 10 años, perdieron la vida en la noche del sábado intoxicados por un escape de gas ocurrido en su vivienda de Jerez de la Frontera, en la que residían otros dos hijos de 16 y 19 años que no estaban en la casa en el momento del siniestro. Pasaron la noche con unos familiares.
Según las primeras hipótesis, el escape se produjo por una mala combustión del gas en la casa, situada en el bajo de un bloque de viviendas de cinco plantas, cuyo centenar de vecinos fueron desalojados hasta que el edificio estuvo bien ventilado.
Los hechos ocurrieron sobre las 22.30 horas del sábado, y el niño fue rescatado aún con vida del inmueble, aunque falleció poco después en el hospital.
Según los vecinos, esta misma vivienda sufrió un incendio hace 19 años que costó la vida a dos niñas de 7 y 12 años, motivo por el cual permaneció deshabitada durante varios años, hasta que finalmente fue ocupada por el matrimonio ahora fallecido.
Sebastián Martín, que fue la primera persona que entró en la vivienda alertado por el fuerte olor a gas que se desprendía del interior, explicó que el menor se encontraba en su habitación con una videocámara entre sus manos que reproducía imágenes de una procesión juvenil previa a la Semana Santa que había tenido lugar en la barriada de San Telmo el viernes 14 de marzo.
Este vecino volvió a entrar para encontrar al matrimonio y localizó a los dos muertos sobre el suelo del cuarto de baño y con la bañera a punto de rebosar.
El Ayuntamiento de Jerez ha declarado tres jornadas de luto oficial y la alcaldesa Pilar Sánchez trasladó los familiares y amigos de las víctimas su "más hondo pesar", así como "el sentimiento de tristeza del conjunto de jerezanos y jerezanas".
Además, dio instrucciones para que los otros dos hijos del matrimonio "reciban todas las atenciones que puedan precisar" en estos momentos "de profundo dolor", en los que el consistorio está "a su disposición".
