Los nuevos responsables de la Dirección General de Tráfico (DGT) han decidido renunciar a la creación de la denominada licencia de prácticas, un permiso que hubiera autorizado a conducir sin carnet a quienes hubiesen superado las clases teóricas y fueran acompañados por un adulto con permiso. La medida se había incluido en el borrador del reglamento de conductores redactado por el anterior Gobierno, pero

éste nunca lo llegó a aprobar.

Fuentes de la DGT explicaron que la idea inicial de crear una licencia en prácticas no era mala. En otros países, como Francia, está sirviendo para que los conductores puedan adquirir experiencia antes de lanzarse en solitario a la carreteras, pero en la versión española "se habían incorporado tantos requisitos que la hacían inoperante".