Mal que le pese, Xavier Sard tiene al menos una cosa en común con José María Aznar: poca gente admite en público que ve/vota su programa. Pero después, cuando se conocen los datos de audiencia y el escrutinio ha acabado, ahí están los dos, con la sonrisa de oreja a oreja. Y la de Sard parece de cera. Seis años lleva ya machacando a cualquier candidato que se ha atrevido a enfrentarse a él y haciendo oídos sordos a los críticos de televisión que le acusan de que su programa es telebasura. "A mí lo que digan los colegas de la tele me trae sin cuidado", afirma en el libro-entrevista Me encanta que me hagas esta pregunta . "Yo no tengo colegas en la tele", añade.

El periodista (que aparece en la foto, ayer, junto a Carlos Latre y Boris Izaguirre) presentó en sociedad esta recopilación de preguntas que le han hecho sus espectadores. El lugar escogido, el plató del programa, en Sant Just (Barcelona). Eran las seis de la tarde pero parecía que fueran las doce de la noche. Allí estaba Jorge Salvador (poniendo la banda sonora), Boris Izaguirre (que se desnudó, claro) y Carlos Latre.

La pregunta, a quemarropa, no tardó en llegar: Sard , ¿no le gustaría hacer algo serio? A Sard se le revolvió la bilis. "Un programa serio es el que yo hago. No hay que confundir seriedad con aburrimiento". Y siguió: "Parodiar a Ana Palacio o decir no a la guerra en plena campaña electoral es muy serio". El presentador aseguró que lo suyo no es vocacional. "Es porque me lo pagan bien. Mi sueldo da vergüenza", dijo.