Dos tercios de los hogares españoles (alrededor del 65%) ya están listos para recibir la televisión digital terrestre (TDT), que vivirá su primer gran examen en España el próximo mes de junio --con la primera fase del apagón analógico-- y terminará su implantación el 3 de abril del año que viene. Pese a todo, el dato, facilitado por el secretario de Estado de Telecomunicaciones, Francisco Ros, tiene un complemento esperanzador: "Las encuestas indican que el 97% de los españoles sabe al menos qué es la televisión digital terrestre", según explicó ayer en el foro 3, 2, 1... ¡TDT! , celebrado en Lérida.

Sobre el calendario previsto, Ros se mostró rotundo: "No hay vuelta atrás". Ajeno a las presiones de los operadores privados, al lento ritmo con que se está instalando la TDT en algunas zonas y a las dificultades que se plantean para llegar a todos los rincones de la geografía española, el Gobierno está decidido a mantener la fecha prevista para el apagón total: 3 de abril del 2010. "La situación española es muy distinta a la de EEUU", señaló Ros, donde se ha decretado una prórroga (hasta junio) para el despliegue de la TDT.

Dentro de un año, en España, "solo quedará entre el 1,5% y el 2% del territorio sin cobertura", admitió el secretario de Estado de Telecomunicaciones. Los puntos donde no llegue la señal terrestre --poblaciones de alta montaña o insulares-- solventarán la situación "a través del satélite". "Por eso la nueva ley exige a los operadores poner su señal en plataformas de satélite", indicó Ros.

El foro de Lérida sirvió también para anunciar el proyecto de Televisión Española (TVE) de poner en marcha, a partir del próximo mes de julio, una experiencia de TDT de alta definición, que se producirá desde los estudios de Sant Cugat, cerca de Barcelona. Eso sí, las primera pruebas de la alta definición se realizarán en Valladolid y, desde ahí, se irán extendiendo paulatinamente al resto de provincias españolas.