Como Fama ¡a bailar! (Cuatro) es un concurso de baile y no de convivencia, a nadie le debe extrañar que el ganador de la tercera edición sea el chico que peor se llevaba con sus compañeros. Jonathan Anzalone, un musculoso italiano de 22 años residente en Los Angeles (EEUU), se alzó el pasado domingo con el triunfo gracias a los votos del público, que no tuvo en cuenta ese carácter díscolo y problemático del joven que le abocó a pasarse solo prácticamente todo el concurso.

Ayer compareció tras haberse pasado la noche sin pegar ojo. Estaba acompañado por la pareja ganadora: el mallorquín Javier Vachiano y la cubana Yaima Arias. Los dos tenían esa cara de circunstancias que se les queda a los sorprendidos y contrariados. Sobre todo Yaima, favorita para llevarse el premio individual. "Estaba preparada psicológicamente porque presentí que no iba a ganar", afirmó. Por lo menos, logró el de parejas, que "significa mucho", al "darlo los profesores".

Jonathan parecía haber ganado la batalla más importante de su corta vida. "Me gustó ver las caras de los compañeros sorprendidos. Algunos lloraban, quizás porque había ganado yo", dijo con sorna. Reconoció que estuvo a punto de abandonar el concurso "al tercer mes" porque se sentía "muy solo". "Es muy difícil convivir con 19 personas con las que no te llevas bien", explicó, antes de admitir que él "no tenía mucha disciplina" porque se ha pasado la vida "en la calle, descontrolado".

El jefe de programas de entretenimiento, David Cardona, no se atrevió a desvelar si habrá otra edición. Pero los datos de audiencia no han estado a la altura de otras temporadas (la gala final registró un 9,3%). "Si Fama vuelve, volverá muy revolucionado", advirtió Cardona.