La petrolera portuguesa Galp dijo ayer que ha descartado definitivamente la posibilidad de incorporarse al proyecto de Refinería Balboa como socio tecnológico, es decir, aportando parte del capital, aunque no descarta colaborar con el Grupo Gallardo --promotor de la refinería-- en un nivel técnico o de consultoría. Sin embargo, el propio Grupo Gallardo descartó esta posibilidad a través de un comunicado en el que avanza que "prevé disponer en breve de un socio tecnológico" una vez que fructifiquen los contactos que se están manteniendo con "diversas compañías petroleras de primer nivel mundial".

La noticia saltaba ayer tras la publicación en el Diario Económico de Portugal de una información en la que se aseguraba que la nueva dirección de Galp había rechazado su participación como accionista en la refinería que el Grupo Gallardo prevé instalar en la comarca de Tierra de Barros. Esta posibilidad sí había sido estudiada, indica el periódico luso, por los anteriores directivos de la compañía. A cambio, añade esta publicación, la firma portuguesa ha reafirmado su disponibilidad a establecer otros tipos de colaboraciones.

LA VERSION OFICIAL Posteriormente un portavoz autorizado de la petrolera aclaraba a EL PERIODICO EXTREMADURA que la compañía no se había pronunciado públicamente al respecto, aunque sí es cierto que "la empresa descarta participar en la refinería como socio, pero contempla la posibilidad de una participación en calidad de consultor o asesor tecnológico". Esta colaboración podría plasmarse en la elaboración del proyecto o en su fase de construcción.

Por su parte, el Grupo Gallardo apuntó en un comunicado que el proyecto Refinería Balboa "prevé disponer en breve de un socio tecnológico", para lo que se están manteniendo "contactos y negociaciones" con diversas petroleras "de primer nivel mundial", unas conversaciones que se iniciaron "paralelamente" a las desarrolladas con Galp.

Asimismo, la empresa de Jerez de los Caballeros insistió en que la firma portuguesa "nunca ha estado dentro del proyecto" y que en cualquier caso su cooperación "habría tenido una mayor vertiente industrial que tecnológica, dado que la compañía del país vecino no dispone de tecnología propia suficiente para acometer un proyecto de este tipo". Aún así, el Grupo Gallardo considera que hay "sinergias" con Galp "que podrían ser motivo de colaboración en el futuro" en el marco de esta nueva planta de refino de petróleo.

Por otra parte, los promotores de la futura refinería extremeña recalcaron ayer que la decisión de la petrolera portuguesa "no supone ralentización alguna del proyecto" porque desde hace meses venían trabajando con esa hipótesis. La baja de Galp como socio tampoco cierra la posibilidad de que la planta de Tierra de Barros se conecte con el puerto luso de Sines a través de un oleoducto, opción que se baraja como alternativa a la conexión a través del puerto de Huelva.

De esta forma, Refinería Balboa ha confirmado que finalmente el proyecto contará con un socio tecnológico, una cuestión que pareció descartarse hasta en dos ocasiones tras la renuncia de Repsol --que quería más participación accionarial-- y las dudas iniciales de Galp --en pleno proceso de renovación en su cúpula directiva--.