Al capitán Alatriste le tocó la pasada semana el difícil trago de encontrarse con la prensa en pleno rodaje de la película. Después de ocho semanas metido en la piel del soldado del Siglo de Oro creado por el escritor Arturo Pérez Reverte, el actor Viggo Mortensen destaca el buen clima en el que está transcurriendo "este cuento", como define el filme, y confiesa sentirse muy cómodo en el papel. "Va a ser muy triste cuando termine", aseguró.

El equipo comandado por Agustín Díaz Yanes se encuentra estos días en Sevilla, donde han ambientado parte de las escenas en las que Francisco Quevedo (Juan Echanove) confiesa al capitán curtido en Flandes sus planes para influir en la política de la España imperial del siglo XVII, así como el encuentro de Alatriste con el inquisidor general, papel interpretado por la actriz Blanca Portillo.

Junto a ellos, las intrigas palaciegas y las aventuras de caballeros y espadachines contarán con rostros tan conocidos como Eduardo Noriega, Pilar López de Ayala, Unax Ugalde, el italiano Enrico Lo Verso y Elena Anaya, que apuntó las ventajas de su papel "porque soy la amante de Ugalde y de Noriega y me lo paso muy bien". Todos confesaron haber leído las cinco entregas del capitán Alatriste, especialmente El sol de Breda , que según el director y guionista ha inspirado muchas de las secuencias de esta película.

MUCHAS DIFICULTADES

"Han sido días muy largos y, a veces, difíciles, pero el rodaje va rápido y lo estamos pasando muy bien todos", explicó Mortensen, que lamentaba la falta de tiempo para conocer las ciudades andaluzas por las que han pasado. El actor estadounidense explicó que no se ha sentido extraño rodando en nuestro país, y ofendido ante la pregunta de una periodista sobre su escasa adecuación al perfil del español medio del Siglo de Oro, señaló: "Me siento tan extraño en España como Alatriste, oriundo del norte de España, según el texto original, se pudo encontrar en Andalucía". "No es nada raro, había muchos españoles con ojos y cabello claro en el norte español en esa época", terció el director.

PREPARACION

Para prepararse y conocer mejor la época de la película, el actor se leyó, aparte de la serie de Alatriste, numerosos libros de historia sobre el Siglo de Oro. Además, visitó en varias ocasiones el Museo del Prado y otras pinacotecas para observar con detenimiento los cuadros de Velázquez y hallar la inspiración: "Se ven con una atención distinta que si vas solamente a disfrutar de la pintura".

La única dificultad que ha tenido ha sido la de controlar su castellano, aprendido en Argentina, "todos los días", tarea para la que ha contado con la ayuda de todo el reparto de actores. "Lo más complicado ha sido al principio, ahora va mejor", dijo Mortensen, que en este tiempo ha podido ampliar su vocabulario --palabrotas incluidas, según confesó--. En este sentido, el actor afirmó ser muy crítico con sus actuaciones, "aunque no tanto como para irme a casa".

"No comprendo a los actores que detestan verse en pantalla, a mí no me molesta, porque quiero hacerlo bien y es una forma de corregirme y aprender".

Tras pasar por varias de las cintas más taquilleras del cine americano, entre ellas El señor de los anillos , Mortensen cree que no hay grandes diferencias entre el trabajo que se hace en Estados Unidos y en España. "Cada rodaje tiene su propio ritmo y cambias los medios pero el dinero tampoco influye mucho", aseguró. "Lo importante es que haya un buen ambiente para rodar, y Tano (refiriéndose a Agustín Díaz Yanes) nos lo pone muy fácil. Nos da permiso para pasárnoslo bien", concluyó el afamado actor.