La aventura gráfica no vive sus mejores momentos, pese a intentos tan loables como Syberia. Los nuevos gustos del jugador medio actual tienden a productos destinados a consolas, donde la rapidez y los motores de 3D cada vez más avanzados predominan sobre la paciencia, la lógica y la deducción, cualidades básicas para cualquier aficionado al género de la aventura y que, curiosamente, se han puesto de moda con el éxito televisivo de series de forenses o médicos jugando a detectives.

De ahí que una distribuidora como Friendware se haya decidido a lanzar en España una aventura gráfica de la vieja escuela, que sigue los esquemas de Broken Sword o la española Runaway . La jugabilidad de estos títulos recae en escenarios ricamente ambientados con multitud de objetos para examinar, gran cantidad de diálogos y un inventario que se constituye en la clave para resolver los enigmas o satisfacer las demandas de los personajes con el que se relaciona el protagonista.

El juego está basado en un personaje bastante famoso en el cómic italiano, con abundantes dosis de misterio y humor. Martin Mystere es un eficaz investigador científico, guapo, fuerte e irónico, que tiene la suerte de encontrar objetos únicos en el mundo. Su ayudante es Java, uno de los últimos hombres de Neandertal que han sobrevivido en una lejana isla. Su mano derecha es su mujer, Diana, una rubia tan inteligente como femenina, que presume de una lógica aplastante.

Juntos forman un buen equipo en este juego, donde un científico descubre cómo rozar la inmortalidad. Asesinatos, muchas pistas por descubrir, objetos por recoger y lugares exóticos como las pirámides mayas, son los principales atractivos de esta aventura que muchos reconocerán de otros juegos similares. Martin Mystere puede proporcionar muchas horas de entretenimiento. Mayores de 7 años.