El primero de los impuestos que recauda el ayuntamiento, el de vehículos, está puesto ya al cobro. Pero será entre el próximo 10 y 12 de abril cuando se pasen los recibos con domiciliación bancaria, que son la mayoría. El cargo total de este impuesto no ha sufrido modificaciones significativas en la última década. En 2012 se pusieron al cobro recibos por valor de 4.251.962 euros. Este año la cantidad global suma 4.109.529, incluso esta cifra está por debajo de la previsión de ingresos hecha para este ejercicio y que en el anteproyecto de los presupuestos asciende a 4.162.0000 euros.

Este año, al igual que el pasado ejercicio, el periodo voluntario de cobro del impuesto es de tres meses, hasta junio. Hasta el pasado año, el plazo era de dos meses. En 2020, al coincidir el periodo de cobranza con el del confinamiento domiciliario, se amplió un mes más, un plazo de tres meses que se repite en este ejercicio. El periodo de pago voluntario se mantiene abierto hasta el 21 de junio.

Este impuesto tiene hasta 24 tramos para los seis tipos de vehículos por los que se tributa (turismos, motos, camiones, autobuses, remolques y tractores -en el municipio había 1.322 tractores en la última estadística de vehículos publicada por el ayuntamiento y correspondiente al año 2018-).

La mayoría de los contribuyentes pagan por turismos que están entre los 8 y los 15,99 caballos fiscales. La tarifa no se modifica desde 2006, cuando se produjo un incremento que se aplicó durante dos anualidades. Desde 2012 si no se paga el impuesto de rodaje no se puede vender el vehículo, ya que la tramitación de la venta se bloquea en la Dirección General de Tráfico. Los vehículos de más de veinticinco años están exentos.

Las cantidades que se pagan por turismo son de 17 euros para los que tienen menos de ocho caballos fiscales, 50 euros para los vehículos que tienen entre ocho y 11,99 caballos fiscales, 100 para los que están entre los 12 y los 15,99 caballos fiscales, 125 para los que están en el tramo de entre los 16 y 19,99 y 140 para los que tienen 20 o más caballos fiscales.

RECIBOS / En los recibos puestos al cobro hay un ligero incremento respecto a años anteriores. A partir de 2012 se fue reduciendo la cantidad de recibos. Ese año se pusieron al cobro 59.631. Desde entonces esa cifra se fue reduciendo hasta los 57.839 de 2015. No se volvió a superar la cifra de 2012 hasta el ejercicio de 2019 cuando se sobrepasó las 60.000 cuotas. Este año se ponen al cobro 61.470, que son casi mil más que el año anterior, cuando se quedó en 60.503.

La cifra total de vehículos que hay en el municipio es mayor. La última estadística que publicó el ayuntamiento arrojaba una cifra de 71.413 y es del año 2018. Al menos habrá unos diez mil vehículos que estén exentos del pago del tributo. Entre las causas de exención para abonar la cuota que aparecen en la ordenanza municipal están que el vehículo tenga una antigüedad superior a 25 años, los adscritos a la seguridad ciudadana, las ambulancias o los matriculados para personas dependientes que sean para su uso exclusivo.

El vehículo por el que más se tributa es por los autobuses con más de cincuenta plazas, por los que se tienen que abonar 205 euros, la misma cantidad que se paga por los camiones que tengan una capacidad de carga útil de 10.000 o más kilos.

En los informes que la Asociación Europea de Automovilistas hace sobre el tipo impositivo que se cobra en los municipios, Cáceres aparece en la cola, entre las capitales en las que menos se paga por el impuesto de rodaje.

En el ranking tributario que publica el Ayuntamiento de Madrid sobre la fiscalidad en las capitales de provincia, Cáceres aparece como el quinto municipio en el que menos se paga por este impuesto, solo tiene por detrás a Zamora, Ceuta, Melilla y Santa Cruz de Tenerife, aunque en las dos ciudades autónomas se aplica una bonificación del 50% de acuerdo con el texto refundido de la Ley de Haciendas Locales. La comparativa se hace para el tramo de vehículos que están entre los 8 y los 11,9 9 caballos fiscales.

El impuesto de vehículos es el segundo que más ingresos deja en el ayuntamiento, solo superado por el IBI, del que para este año se prevé una recaudación de 22,5 millones de euros. El resto de impuestos están por debajo, tanto los propios como las cesiones que se hacen de tributos estatales, así del impuesto de actividades económicas se espera una recaudación de 1.800.000 euros, de la Plusvalía solo se llega hasta los 600.000 euros, de Construcciones se alcanzan los 3 millones de euros de previsión de recaudación.

En cuanto a las cesiones de impuestos estatales que se prevé realizar esta año al ayuntamiento por parte de Hacienda, del IRPF se calcula una cesión de 2.085.000 euros, mientras que del IVA son 1.800.000 euros, del resto de tributos se hacen unas previsiones de recaudación que son menores.