Inmejorable balance para los feriantes de esta insólita edición de San Miguel de Cáceres. La feria de septiembre, renovada tras casi treinta años sin celebrarse a propuesta del ayuntamiento debido a que en mayo las restricciones no permitían que tuviera lugar con todos los puestos, concluyó este domingo con un respaldo multitudinario por parte de los empresarios y los cacereños.

Aunque la cita arrancó con reservas por parte de los propios feriantes, que se mostraron en un primer momento escépticos ante el cambio de fechas y una previsión climatológica no muy favorable, finalmente se cierra con una valoración unánime de satisfacción. En primer lugar, tal y como pone de manifiesto a este diario Rosa Morgado, portavoz de la plataforma de feriantes y presente esta semana con su atracción en el recinto ferial, agradecen la gran acogida que han recibido por parte del público cacereño desde la primera jornada y en segundo lugar, aplauden la disposición municipal tanto para negociar las fechas desde hace meses como por haber escuchado la última petición de la plataforma esta última semana para que se ampliara la cita cuatro días más para compensar las pérdidas por las lluvias previstas. «Esa segunda semana nos ha dado la vida y la feria en sí en Cáceres ha sido un alivio después de un año tan difícil para nosotros, estamos muy contentos», sostiene Morgado, que sí pone de manifiesto que en un primer momento llegaron «con miedo» y «con expectativas bajas» y para su sorpresa, «Cáceres ha respondido con creces».

Los feriantes apuestan para 2022 por San Fernando pero no descartan pedir que se repita San Miguel tras el buen resultado

De hecho, entre las curiosidades que destaca la portavoz de los feriantes sobre esta feria y anteriores en otras localidades es «la solidaridad generalizada» de los asistentes que en este año se han repartido por las atracciones y puestos para que todos los empresarios tuvieran sus ingresos. «Volver así es una alegría para nosotros y también visto alegría en las familias, está bien que después de estos meses tan duros, vuelva la alegría», añade.

En relación a las ferias de 2022 en la capital cacereña y sobre si el buen resultado de San Miguel ha sentado un poso que mantener de cara a próximos años, Morgado insiste en que en el calendario regional la cita por la que apuestan por fechas sigue siendo San Fernando, en cualquier caso no descartan pedir al ayuntamiento que se repita otra cita similar en San Miguel tras la gran acogida. «A nosotros nos encantaría que se celebraran las dos ferias, pero entendemos el desembolso y la inversión tan grande que supone para el ayuntamiento en cuanto al despliegue de limpieza y seguridad, está claro es que para nosotros mayo es imprescindible porque nos da un respiro después del invierno», concluye.

Lo cierto es que al margen de si al próximo año, ya con expectativas de recuperar la normalidad en todos los sentidos si la pandemia lo permite, San Miguel deja en la capital un recuerdo que bien se asemeja a las ferias de años anteriores en la ciudad. Desde que arrancó el 23 de septiembre, ha congregado a centenares de familias y ha protagonizado escenas de multitudes, siempre con mascarilla y la protección oportuna. Este domingo dijo adiós con los niños como protagonistas en una segunda jornada de descuentos y con el espectáculo de fuegos artificiales previsto par ala inauguración que se aplazó por la lluvia.