Tras anunciar a todo bombo una reunión de presidentes de comunidades y del Gobierno, han parido una nadería: mascarillas al aire libre y vacunas ¿Y en Cáceres, donde casi todo el mundo las lleva y casi todos estamos vacunados, qué hacemos para que los contagios no sumen ya más de 200 al día? ¿Y los muertos? 

Porque los presidentes parecen ignorar que además de los ingresos y camas UCI tenemos una atención primaria a la que es prácticamente imposible acceder como tampoco deben saber que enfermedades crónicas u ocasionales no son tratadas con la debida atención y que se debe hacer todo lo posible por evitar una sola muerte porque el primer derecho es a la vida.

El presidente Vara se ha disfrazado de Ayuso y revestido de demagogia se erige en defensor de la restauración y nos pide empatía con los negocios de restauración mientras los ciudadanos cancelan comidas y cenas pues han oído que incluso centenares de sanitarios se han contagiado en cenas en Madrid, en Galicia y en otros lugares, las grandes empresas vuelven al trabajo en casa, cotillones autorizados los cancelan sus organizadores o se restringen, los especialistas piden la supresión de cabalgatas y eventos multitudinarios... 

Oiga, Excelentísimo y Reverendísimo señor Presidente, que esto no va de empatías, que además de ciencia esto va de sentido común como se lo demuestran los ciudadanos que procuran no cenar con niños y abuelos, y eso duele más que perder dinero, que cancelan viajes, y eso es arrasar las expectativas de todo un año. 

Y se nos dice que en nombre de la libertad es anticonstitucional impedirte entrar en un bar a comerte una paella o unos langostinos o incluso emborracharte pero no es anticonstitucional impedirte entrar en un hospital a consolar a tu padre.

Claro que esta misma consejería de salud extremeña que nos recomienda ir de bares es la misma que aconsejó a sanitarios no celebrar comidas y cenas cuando aún no había tantos contagios. 

Estamos condenados pues tribunales y políticos no quieren ver que debemos ir por delante del virus.

¡Vaya tropa!