Cuando la ronda de la Pizarra comenzó a tomar forma en los años 60, era una vía de la periferia que desembocaba en un descampado e iba paralela a otro. Sin embargo, hoy se ha convertido en una calle estratégica que da cohesión a antiguos y nuevos barrios tan relevantes como Las 300, Nuevo Cáceres, Casa Plata, Vera Cruz o Moctezuma. Una primera obra integral tratará de uniformarla y poner fin al caos urbanístico y a las deficiencias que presenta, fruto de su gestación a trompicones. Ya está todo despejado para su inicio: La Mesa Municipal de Contratación ha adjudicado la reordenación a Construcciones Sevilla Nevado por un importe de 217.536 €.

Será la primera de las dos fases proyectadas y se ejecutará en cuatro meses. Reorganizará la zona de los impares desde la calle Andalucía hasta la avenida de Dulcinea, la zona más antigua y con mayores carencias (el resto se acometerá en una segunda fase). La solución pasa por ampliar la acera para adecuarla a la ordenanza de accesibilidad (es tan estrecha que el peatón debe bajarse a la calzada en ciertos puntos). Se extenderá hasta los 3 metros, de modo que los dos carriles de circulación existentes se ampliarán hacia la mediana. A fin de asegurar una zona de protección adecuada en esta zona media para el peatón, ya en la fase dos se reducirán los carriles, ahora de gran anchura. La pérdida de continuidad entre las dos fases se subsanará con una glorieta en la intersección con la calle Andalucía, que a su vez mejorará el cruce.