Diecinueve detenidos en un gran operativo contra la venta de drogas en Cáceres. La Policía Nacional ha hecho públicos este viernes los detalles de la operación 'Cancela', una intervención con la que han desarticulado siete puntos desde los que operaba un clan familiar que se dedicaba a vender cocaína, marihuana y hachís en las principales zonas de bares de copas de la ciudad.

Según han puesto de manifiesto fuentes policiales, están acusados por un presunto delito contra la salud pública. Tienen entre 23 y 73 años y la mayoría cuenta con antecedentes penales por hechos similares. Cuatro de los detenidos han ingresado en prisión.

Esta intervención pone fin a una investigación que arrancó a principios de año. Fue entonces cuando agentes detectaron indicios de que una familia pudiera estar dedicándose a vender cocaína, hachís y marihuana en la Madrila, plaza Mayor y Pizarro.

Tras realizar varios seguimientos, la policía identificó a todos miembros del clan y a sus principales proveedores, dos hombres y una mujer. En ese sentido, los agentes constatan el "continuo trasiego" de conocidos consumidores de drogas en los domicilios de los investigados.

Fue entonces este pasado 10 de noviembre cuando se llevaron a cabo siete registros en viviendas de la Cañada, Madrila, las Trescientas y Pinilla. En estas intervenciones se incautaron mil dosis de cocaína, 720 gramos de hachís, 166 gramos de marihuana, un revolver y 8.000 euros en efectivo.

Segunda macrooperación en lo que va de año

Esta macrooperación se produce cinco meses después de otro gran operativo contra el tráfico de drogas en la provincia de Cáceres. En este dispositivo denominado 'Kbello-Capote' se detuvo a 16 personas, todas relacionadas con el también denominado clan de Eljas.

En este caso, todos los detalles del operativo fueron ofrecidos por la entonces delegada del Gobierno, Yolanda García Seco. Once de los dieciséis acusados pertenecen a una misma familia y vinculada al contrabando de tabaco. A todos ellos se les imputó delitos contra la salud pública, pertenencia a grupo criminal, defraudación de fluido eléctrico, contrabando de tabaco, tenencia ilícita de armas y contra la propiedad industrial. Catorce ingresaron en prisión provisional.

En esa intervención los agentes incautaron 13 kilos de cocaína, 23 kilos de sustancia de corte para adulterar la droga, 87.000 pastillas, 250.000 euros en metálico y armas, entre las que se encuentran varias granadas. La operación se inició en febrero de 2021 y se prolongó hasta junio de este año.