El balance de casi tres semanas de rastreo

20 días sin rastro de Vicente, el desaparecido de Hinojal al que le tocó un millón en la lotería

La búsqueda sobre el terreno se retomó el pasado jueves en el río Tajo, aunque sin éxito

Los agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil continúan investigando para dar con el paradero del hombre de 79 años

Imagen de la última batida, celebrada en el Club Náutico Tajo.

Imagen de la última batida, celebrada en el Club Náutico Tajo. / Jorge Valiente

Se cumplen 20 días sin rastro de Vicente, el vecino de Hinojal desaparecido al que le tocó un millón de euros en la lotería. Según anunciaron fuentes de la Benemérita a este diario, los agentes de la Policía Judicial seguían con la investigación para dar con el paradero del hombre de 79 años y solo harían batidas sobre el terreno si las considerasen necesarias. El pasado miércoles anunciaron que los efectivos del grupo de actividades subacuáticas estaban convocados de nuevo la jornada siguiente para peinar el cauce los dos ríos más próximos al municipio: Tajo y Almonte. Pero fue un nuevo intento frustrado.

La Guardia Civil aprovechó las instalaciones y el embarcadero del club náutico Tajomar para desplegar a primera hora de la mañana un dispositivo compuesto por una zodiac con los buzos, que navegaron cuatro kilómetros con la esperanza de localizar a Vicente. De igual manera, se desplegaron sobre el terreno los especialistas aéreos, que sobrevolaron el mismo territorio con drones y varias patrullas, que recorrieron de nuevo las inmediaciones de la localidad cacereña.

En torno a la marcha de Vicente hay varias incógnitas. Por el momento, se desconoce si corresponde a una huida voluntaria o puede tratarse de una desaparición forzosa, tal y como sostuvieron personas de su familia. En los primeros días de su búsqueda, allegados apuntaron que en el domicilio en el que residía encontraron su teléfono móvil, un dispositivo que siempre llevaba consigo, y dejó la cama sin hacer. Otro de los datos que se han apuntado desde los primeros días hace mención a una retirada de efectivo en un cajero de la localidad, que se realizó el mismo día de su desaparición.

Sobre Vicente

Vicente vivía solo y mantenía una rutina marcada. Era un hombre de costumbres, compraba el pan cada dos días y acudía frecuentemente a los bares del pueblo. Su ausencia no fue sospechosa en un principio, pero al prolongarse durante más de una semana hizo desconfiar a los que le veían con frecuencia. Varios familiares se personaron en su domicilio por temor a que hubiese sufrido un accidente tras constatar que no respetaba su rutina y fue gracias a eso que descubrieron que no estaba en casa. En concreto, fue su hermana, que vive en Madrid, la que interpuso la denuncia cuando llegó a la localidad como cada año por la festividad de Las Candelas. Ocurrió en la jornada del lunes de la pasada semana. 

Batidas sobre el terreno

Al día siguiente comenzaron las labores de búsqueda, ya que la agilidad es crucial en las primeras horas de este tipo de actuaciones, y el miércoles volvieron a peinar los alrededores. 

Las jornadas concluyeron sin éxito y el jueves se produjo una nueva batida con un amplio dispositivo en el que participó la Guardia Civil, bomberos del Sepei de Cáceres, protección civil y voluntarios. Al mando estaba el capitán de la Guardia Civil en Cáceres, Ángel Bautista. En total, un centenar de personas recorrieron a pie las inmediaciones durante varias horas, pero no hallaron indicios de su paso. 

El viernes tuvo lugar el mayor despliegue de medios: le buscaron por tierra, agua y aire. A las batidas se sumaron equipos de especialistas acuáticos y aéreos con el objetivo de cerrar el cerco sobre el paradero del hombre. En esta ocasión, no trabajaron los vecinos, los que mejor conocen el terreno. Ya el fin de semana, la Guardia Civil continuó buscando pruebas e indicios para dar con el paradero de Vicente, aunque siguieron las batidas sobre el terreno. Los agentes concentraron sus esfuerzos en la investigación, que mantenía aún abiertas todas las líneas posibles para localizar al hombre.

Suscríbete para seguir leyendo