Día Internacional contra la LGTBIfobia

Testimonio de una víctima de LGTBIfobia: "Me dijeron 'bollera de mierda, te vamos a prender fuego' durante dos años"

"La unidad de la Guardia Civil especializada en delitos de odio inició una investigación paralela y no han vuelto a acosarme", dice Noelia González, natural de Los Santos de Maimona

Extremadura Entiende ha atendido a 25 personas en lo que va de 2024. Solamente el 16% lo ha denunciado ante el juzgado

Noelia González, en el medio, abraza a Flor Mirón y Sisi Cáceres, de la asociación Extremadura Entiende.

Noelia González, en el medio, abraza a Flor Mirón y Sisi Cáceres, de la asociación Extremadura Entiende. / Ángel García Collado

Armada de valor, con la voz temblorosa y acompañada de la presidenta de Extremadura Entiende, Sisi Cáceres, y de la psicóloga Flor Mirón. Así ha contado Noelia González, de Los Santos de Maimona, cómo llegó hasta la asociación. Los hechos se remontan hasta 2021, cuando tuvo lugar el trágico asesinato de Samuel Luiz por una agresión homófoba a la salida de una discoteca en la madrugada del 3 de julio. Como repulsa por esta situación, muchas personas se sumaron a la protesta y colgaron la bandera del colectivo LGTB en sus balcones para protestar. Noelia fue una de ellas. Tan solo habían pasado unos días cuando una persona vestida de operario se subió a una escalera para retirar el símbolo arcoíris de su terraza: "A mí me dio mucha pena, así que me fui a comprar más banderas y llené todas las ventanas con ellas como rechazo a lo que habían hecho. Ese mismo día, tenía un grupo de personas menores de edad gritándome 'bollera de mierda, te vamos a prender fuego y te vamos a matar' a la puerta de mi casa. Y eso se repitió durante dos años, todos los fines de semana."

"Yo también caí en el 'son cosas de críos, ya se les pasará' porque cuando vas a denunciar es lo primero que te dice la policía. Pero el tiempo pasa y ellos continúan, y cada vez con más impunidad y más violencia. Llegó un momento en el que empezaron a pegar con palos y con piedras a mi puerta mientras me amenazaban. Ahí fue cuando peté psicológicamente y decidí venir a la asociación", explica González. Comenzó entonces un período de más de nueve meses de terapia con Mirón, que "consiguió que saliese de donde me había metido, porque yo no quería ni salir de casa y me tuve que ir a vivir con unos amigos porque no me sentía segura". "Eran un grupo de 10 o 25 chavales, que siempre iban de noche y era casi imposible identificarles. Denuncié y, a los tres meses, se archivó la denuncia. Les dije que tienen un local en la misma calle que yo, allí se juntan y se vienen arriba todos", relata.

"A los dos años volvimos a intentarlo y la unidad de la Guardia Civil especializada en delitos de odio me aconsejó no denunciar por los problemas que iba a ocasionar. Ellos hicieron una especie de investigación paralela. A raíz de esto, no han vuelto a venir a acosarme. Todo se paró, yo pude seguir adelante y empezar a sanar todos los daños", recuerda. "Es verdad que esos chavales siguen libres, siguen teniendo un local en la misma calle que yo y, si mañana se vuelven a sentir impunes, volverán a atacarme. Ninguno se ha disculpado ni ha reconocido nada. Y varios padres saben lo que ha pasado y miran para otro lado porque nadie va a decir que su hijo es un homófobo", sentencia. "Gracias al tratamiento psicológico, estoy en uno de los mejores momentos de mi vida porque tengo fuerza para poder hablar de esto. Lo he conseguido gracias a ellas", finaliza.

Extremadura Entiende atiende a 25 personas en lo que va de año

Extremadura Entiende ha atendido en los primeros cuatro meses de este año a un total de 25 víctimas de LGTBIfobia en toda la región, de las que el 32% recibieron amenazas; el 24%, insultos; el 20% sufrieron agresión física, y una persona fue víctima de agresión sexual. De los datos ofrecidos por la entidad se desprende que solo el 16% de las personas que sufren un delito de odio lo denuncia ante el juzgado, mientras que el 80% necesita apoyo psicológico.

De las 25 personas que han acudido durante estos cuatro meses a la Oficina de Atención Integral de Extremadura Entiende, el 32% tiene entre 18 y 25 años, lo que supone un repunte de atención a personas jóvenes, que puede deberse a que "están más sensibilizados a la hora de denunciar posibles situaciones de discriminación, la gente joven está más preparada, y tiene mayores niveles de inteligencia emocional a la hora de poder percibir sus necesidades y pedir ayuda".

En cuanto a la identidad de las personas que han acudido a la oficina, el 72% de las personas son mujeres, de las cuales el 64 por ciento son mujeres cis y un 8 por ciento mujeres trans. Y en cuanto a los hombres, hay un 28%, de los cuales el 24% se identifican como hombres cis y un 4% como hombres trans.

Respecto a las orientaciones sexuales, el 48% de las personas que acuden a la oficina son bisexuales, seguido de hombres gays y, por último, de mujeres lesbianas. Sobre la nacionalidad, el 88% son de nacionalidad española y el resto es de distintos países de Latinoamericana.

Según ha apuntado Sisi Cáceres, el nivel de estudio arroja que el 56% de las personas que han pedido ayuda tienen una FP superior o estudios universitarios, y en cuanto a los municipios de residencia de las personas seis personas residen en Cáceres, siete personas en Mérida, una persona de Badajoz y el resto se dividen entre pueblos de las dos provincias.

Suscríbete para seguir leyendo