Tras varios meses trabajando en las esperadas cuentas, el Ayuntamiento de Trujillo aprobó el pasado lunes el anteproyecto de sus presupuestos para 2021, que no contó, por cierto, con el beneplácito de la oposición.

La cuantía con la que tratará de desarrollar sus iniciativas el equipo de gobierno asciende a 8.758.612, 90 euros, una cifra que pretende incluir inversiones, ayudas a empresas y contrataciones, con un remanente de tesorería estimado de 846.724,59 euros.

El gasto principal de dichas cuentas es el de personal, que llega a los 4.145.012, 56, seguido del gasto corriente, con 3.350.310, 56 euros. Y los mayores ingresos llegan a través de los impuestos directos, cuyo cálculo se encuentra en los 3.538.083, 54 euros.

Asimismo, el consistorio trujillano ha contemplado una partida de inversiones reales de 670.000 euros y ha destinado alrededor de 500.000 euros más a contrataciones con respecto al presupuesto de 2017, según destacó José Antonio Redondo, el alcalde, en una de sus intervenciones y en respuesta a las objeciones del Partido Popular.

Inés Rubio, portavoz de los populares trujillanos, echó en falta en las cuentas, medidas que den respuesta a las necesidades del tejido empresarial tras la crisis sanitaria, al igual que la participación de los sectores del municipio en la elaboración del presupuesto.

Por su parte, Redondo contestó que «la responsabilidad de ejecutar los presupuestos es del gobierno, que es el que conoce la realidad económica del ayuntamiento». Así, resaltó que «la sociedad tiene intereses independientes y contradictorios entre sí».

Del mismo modo, Rubio alegó que dichas cuentas «son ridículas y no se han reflexionado» y señaló que las partidas de cultura y festejos «que no se han tocado», podrían haber sido objeto de modificaciones presupuestarias para paliar la situación actual.

El alcalde, entonces, subrayó que «lo que le llegaba al PP de fuera, cuando gobernaba, lo subcontrataba» y afirmó que el gobierno ahora quiere que la mano de obra se quede en Trujillo. «No me venga a dar lecciones de gestión», añadió el edil en respuesta.

Igualmente, Redondo comentó que, durante la etapa de gobierno del PP, 5.650 euros al mes se iban en sueldos políticos. «Nosotros, sin embargo, preferimos dedicarlo a contrataciones y a compra de material», indicó.

De esta manera, las cuentas para 2021 quedaron aprobadas inicialmente con los votos a favor del Partido Socialista y los votos en contra del Partido Popular, algo que pareció sorprender al dirigente trujillano, que espetó irónicamente tras la votación que «al menos no había sido una abstención».