A partir de este viernes 3 y hasta el domingo 5 de junio Cáceres va a ser el epicentro del mundo rural gracias a JATO, un escaparate de las oportunidades que este ofrece con el objetivo de demostrar que se puede vivir y trabajar en un pueblo. Empresas, artesanía, cultura y gastronomía de las 16 comarcas cacereñas llenarán los espacios de la ciudad monumental. También habrá momentos y lugares para el debate y la innovación, así como conciertos en zonas estratégicas. Habrá un pasacalle con algunos de los festejos representativos de la provincia como El Jarramplas de Piornal, Los Tableros de Valdefuentes o el Carnaval de Ánimas de Villar del Pedroso, entre otros muchos. También se instalará una carpa como espacio gastronómico donde diferentes cocineros de restaurantes de la provincia realizarán talleres y demostraciones de cocina en vivo con productos de la tierra como las cerezas, que se encuentra en plena temporada de producción. Carlos Carlos Rodríguez, presidente de Diputación de Cáceres avanza qué se espera de este encuentro.

Usted afirma que ha llegado el momento de las oportunidades del mundo rural ¿Qué circunstancias se están dando ahora para que estos sea así?

Desde hace tiempo vengo diciendo que han llegado las oportunidades al medio rural, pero éste también se ha dado cuenta de ha comenzado una nueva era de posibilidades. La pandemia ha hecho que las personas miren al mundo rural de una forma distinta. Mientras que en el mundo rural durante el confinamiento hemos sido afortunados, pues gozábamos de más movilidad, en el urbano estaban encerrados en pisos. Tenemos en nuestros pueblos un medio ambiente limpio y una vida tranquila. Muchas empresas han comprobado cómo sus trabajadores podían desempeñar sus funciones desde sus pueblos. En la propia Diputación de Cáceres teníamos 500 personas trabajando a través de VPN y la red aguantó sin problemas. Las condiciones que nos ofrecen ahora las nuevas tecnologías facilitan esa mirada. Al hilo de esto hay que recordar la importancia de las inversiones en infraestructuras que permiten las conexiones por carretera. Gracias a la Diputación de Cáceres podemos decir que disfrutamos de una red de carreteras a la altura de cualquiera del país. También se están haciendo inversiones en el ámbito de la urbanización y las zonas industriales en los municipios, mejorando y ampliando redes de abastecimiento, dotando de espacios públicos para deporte, o infraestructuras culturales. Todo ello ha permitido al urbanita descubrir el mundo rural.

¿Cuáles son las principales políticas de desarrollo sostenible que de manera transversal ha llevado a cabo la Diputación de Cáceres desde 2016 con la Declaración de Montánchez sobre despoblamiento del medio rural?

La Declaración de Montánchez fue un punto de inflexión para la sostenibilidad y el desarrollo de nuestra provincia. Por primera vez la Diputación Provincial de Cáceres puso en el escenario político el desarrollo de las zonas rurales. A partir de ella aparece en todas las agendas la sostenibilidad y del desarrollo rural. El no haber tenido un desarrollo industrial permitió que los pueblos tengan un medio ambiente en condiciones óptimas. La sostenibilidad es un eje transversal de nuestras políticas provinciales, como he dicho en muchas ocasiones. Todo eso significó la Declaración de Montánchez: poner en valor las capacidades del mundo rural en la lucha contra la despoblación.

La fibra óptica, los Planes de Acción Territorial que promueven actividades empresariales en distintos sectores, o la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado EDUSI «Plasencia y entorno» y «Cáceres y entorno»… ¿Han transformado para siempre la provincia?

Desde luego. Cuando alguien visita nuestros municipios puede desconectar totalmente de la realidad y a la vez disfrutar de la amplia cobertura de la fibra óptica de la provincia de Cáceres. Hemos conseguido, gracias a la colaboración público-privada, llevar la fibra óptica al 90% de la provincia de Cáceres. La primera Agenda Digital que se aprueba en la Diputación de Cáceres a través del área de Innovación abarca el periodo 2020 al 2025 y contempla una inversión de 40 millones de euros para garantizar una conectividad rápida, accesible y segura para los ciudadanos y las empresas en nuestros pueblos y ciudades. Tenemos las infraestructuras de carreteras, las culturales, las sanitarias y las educativas. Todo esto junto con las nuevas autopistas de la conectividad y la tecnología nos permiten dar un paso muy grande para poner en valor sus potencialidades. 

JATO va a ser una demostración de la vida en los pueblos traída a la ciudad ¿Qué destacaría de su programa? ¿Va a tener continuidad?

Sí, va a tener continuidad y habrá más ediciones de JATO. Es un proyecto ambicioso que pretende implicar a la sociedad civil, a las empresas y a las instituciones. Vamos a ver qué tal se desarrolla este primer encuentro, que estoy convencido que va a ser un éxito porque se ha diseñado de abajo a arriba como todas las políticas de la Diputación de Cáceres. Ese éxito sin duda nos llevará a repetir en años sucesivos. Con JATO, en líneas generales, se va a llevar a la ciudad las potencialidades que hay en el mundo rural y ponerlas de manifiesto en cuanto a posibilidades de empleo, calidad de vida, y sostenibilidad económica y medioambiental. Vamos a ocupar varios espacios dentro de la ciudad de Cáceres. La hemos elegido no solo por ser el gran núcleo urbano provincial, sino también por el índice de turismo que tiene, para que se vea en la ciudad qué es lo que se está haciendo en el mundo rural. Mostraremos las tradiciones, la protección medioambiental, la salud, la formación, la modernidad y la competitividad empresarial que nos viene dada por la conectividad de esa fibra que llega al 90 por ciento del territorio. Hablaremos de inversión e innovación en nuestras comarcas y los empresarios van a exponer sus modelos de negocio y alternativa de emprendimiento para despertar el interés del ciudadano de Cáceres y de quienes nos visiten. Hablaremos también del empleo y de networking. Al final quienes apuestan por la creación de empleo son las entidades públicas y los profesionales, esa colaboración público-privada que tan buenos resultados está dando en la provincia de Cáceres y que nos ha permitido desarrollar muchos proyectos. Hablaremos también estos días de la sostenibilidad y de los productos biosaludables. La provincia de Cáceres se muestra como un territorio alineado con esos Objetivos de Desarrollo Sostenible. Ciudadanos, administración y empresas llevan trabajando desde hace 30 años por modelos desarrollo basados en la colaboración público-privada. De hecho, con la Cámara de Comercio de Cáceres tenemos proyectos en marcha dirigidos a detectar nuevos empleos, emprendedores y empresas. 

¿En qué va a consistir el denominado espacio Conecta Empleo que se celebra dentro de JATO?

El Conecta Empleo es un proyecto para la activación del empleo y la conectividad, como punto de encuentro entre las personas desempleadas y los estudiantes de Formación Profesional, con empresas y entidades de la provincia implicadas en la creación de puestos de trabajo en distintos sectores. Pondremos en contacto a empresas del medio rural con profesionales y estudiantes para ampliar la red de contactos profesionales. Conocerán los nuevos nichos de trabajo que se ofrecen en el mundo rural.

¿Qué es lo que hay detrás de cada plato de nuestra rica gastronomía provincial que se pone en valor en JATO?

Cualquiera de nosotros lo sabe. Lo principal es la calidad de sus productos en general. Detrás de la gastronomía provincial hay sabor, tradición, ingredientes naturales, y muchos de ellos tienen Denominación de Origen Protegida o Indicación Geográfica Protegida, y son la clave de nuestra afamada gastronomía.

Se habla de los estigmas del mundo rural ¿Cuál le parece más sangrante?

No hablaría de estigmas. Hemos estado acomplejados en el mundo rural. Hemos desgranado en esta entrevista la calidad de vida que hay en los municipios y la tranquilidad que hay en ellos. No me gusta hablar de estigmas, sino de las grandes potencialidades de desarrollo del mundo rural y dejar atrás nuestros complejos.

El próximo 2 de junio se celebra en Cáceres un Encuentro de la Comisión de Despoblación y Reto Demográfico de la FEMP. ¿Cuál es su receta para acabar con la despoblación?

Desde el principio cuando pensamos a diseñar JATO pensamos que era importante darle voz a la Comisión de Despoblación y Reto Demográfico de la FEMP. En esa comisión se va a poner encima de la mesa la importancia de las inversiones que nos permitan ese desarrollo que nos hace soñar con un futuro más halagüeño en el medio rural.