La guionista y divulgadora histórica trujillana presenta su primera obra

La extremeña Carmen Sánchez-Risco novela la vida de la primera Mestiza

Escrita en primera persona por su protagonista, es un acercamiento histórico y riguroso a la figura de Francisca Pizarro Yupanqui

Carmen Sánchez-Risco, escritota extremeña autora de 'La primera Mestiza'

Carmen Sánchez-Risco, escritota extremeña autora de 'La primera Mestiza' / HARPERCOLLINS

E. F.

Conseguir que el lector conozca en primera persona la fascinante vida de Francisca Pizarro Yupanqui (28 de diciembre de 1534, Jauja, Perú, 1598, Trujillo), hija del conquistador extremeño Francisco Pizarro y de la princesa incaica Quispe Sisa, descendiente de los emperadores incas y recordada como la primera mestiza de Perú, es la intención con la que 425 años después de su muerte, otra paisana suya, trujillana de nacimiento, Carmen Sánchez-Risco ha escrito su primera novela en la que su protagonista narra en primera persona, como ya hizo Inés de Suárez de la mano de Isabel Allende en ‘Inés del alma mía’, los avatares de su vida en el encuentro entre dos mundos.

‘La primera Mestiza’ (HarperCollins) es el título de esta novela histórica, que surgió, expresa Carmen Sánchez-Risco en una entrevista con la editorial, hace unos años, cuando, cada vez que pasaba por la plaza Mayor de Trujillo, «me quedaba embobada ante aquel busto y cuando la descubrme fascinó lo que representa su vida y su presencia en un contexto histórico como en el que vivió», al tiempo que le pareció «insólito que apareciese siempre en un segundo plano, a la sombra de los hombres de Pizarro. Empecé a tirar del hilo, a buscar datos, a seguirle la pista a través de documentos, ensayos y crónicas y en esa búsqueda descubrí el enorme potencial dramático de la Mestiza», explica. Fue entonces cuando decidió «comprometerme con ella, diseñar un multiformato en torno a su vida y su papel en el nacimiento de una nueva realidad mestiza, su peso entre dos mundos que ya estaban unidos».

La ha escrito para que todos conozcan «la vida de una mujer que alberga la memoria de todos»

En su calidad de guionista, presentadora y directora, Carmen Sánchez-Risco, licenciada en Geografía e Historia por la Universidad de Extremadura, y profesional centrada en la divulgación histórica como contenido audiovisual, lo primero que hizo fue una serie de ficción y un documental, pero la novela se materializó tiempo después porque escribirla «me daba mucho respeto, me parecía una gesta inabarcable», sobre todo porque se confiesa «lectora voraz, admiradora de la literatura con mayúsculas». Hasta que un amigo le presentó a las editoras de ficción de HarperCollins, que le animaron a escribirla y así lo hizo.

Divulgadora de la historia

Carmen Sánchez se define en esta misma entrevista como «una rara avis, podría decirse, una mujer orquesta, con tintes renacentistas, puesto que me he dedicado a diversas tareas. En mi confluyen dos vías, la de la historiadora obcecada en hurgar en el pasado persiguiendo el rigor, llegando a ser una pesada con esto, y la de comunicadora. He trabajado en el medio audiovisual desde hace más de 20 años, también en radio, al final ambas facetas se resumen en una frase: la necesidad imperiosa de contar historias e Historia. Esto me ha llevado a presentar y dirigir programas de televisión, pero también a producir, guionizar y dirigir documentales históricos».  Y ello hasta que decide unificar ambas facetas, «centrarme en la divulgación histórica en medios a través de formatos de tv, documentales y ficción».

Tras recordar que su madre le inculcó desde pequeña el hábito de leer, explica que su objetivo con esta novela es «descubrir los claroscuros de la primera Mestiza, lo que no se cuenta, y acercar a todos la vida de una mujer que alberga la memoria de todos. Ahondar en los aspectos que rodearon al alumbramiento de ese legado humano que surge del encuentro entre dos mundos, ponerse en la piel de una mujer que en sí misma aúna las dos sangres, las dos fuerzas enfrentadas, y asomarse a la Historia desde otro ángulo, uno silenciado y olvidado, y, en mi opinión, infinitamente más interesante», subraya.

El relato

La novela comienza en Madrid, en 1597, cuando Francisca Pizarro Yupanqui, la primera mestiza noble de Perú, heredera de las dos fuerzas imperantes y enfrentadas, una de las mujeres más poderosas y ricas de la época, comienza a redactar de su puño y letra el relato oculto de su larga y azarosa existencia, en una confesión dirigida a quienes deberán juzgar y defender su memoria mestiza.

Así es como, a través de sus 688 páginas, Francisca repasa desde su infancia en Lima, cuando con solo siete años debe huir para salvar su vida y la de su hermano tras el brutal asesinato de su padre, hasta sus días en la corte de Felipe II. La Mestiza, suculenta pieza en el damero de la Conquista, irá narrando una existencia que discurre entre las ansias de ser libre y los dictados del apellido Pizarro y de la estirpe imperial materna. Una lucha por salvaguardar lo que ama y recuperar lo que por derecho le pertenecía, en la que la fiereza del amor adquiere una dimensión extraordinaria, señala la editorial en la reseña del libro, en la que también se hace constar que «épica y conmovedora, en esta hermosa novela, que aúna el rigor con una recreación histórica rica y cuidada», el lector podrá conocer «las intrigas de la corte y las luchas de poder en el Perú, las batallas y los ritos del Incario», pero también «la vida cotidiana de las mujeres españolas e indias, fuertes y sabias, sus recetas, sus cuitas y oraciones, las voces y olores de la selva y las de las cumbres sagradas andinas, los mensajes del agua y los rumores de las calles del Viejo y el Nuevo Mundo».

La hija mestiza y noble del conquistador Pizarro empieza a escribir sus memorias en 1597 en Madrid

Francisca Pizarro cuenta, guiada por Carmen Sánchez- Risco, el encuentro de dos mundos, el alumbramiento de un nuevo legado humano y el peso de la palabra escrita que mata con la misma crueldad que la espada. Francisca crece al tiempo que los grandes sucesos de la historia, rodeada de crueldad y traición. Siempre acompañada de mujeres sabias y fuertes: su tía Inés, la fiel criada Catalina, las indias Nuna y Shaya y protegiéndola desde la distancia su poderosa abuela Contarhuacho y su madre, la desdichada princesa Quispe, la hija del conquistador de Perú, la esposa de su tío Hernando, primero, y del noble Pedro Arias Portocarrero, después, se convirtió en una mujer fascinante, sutil y hechicera, cautivadora, vehemente, crítica, sabia, leal, pasional, astuta, generosa y con una nobleza moral.

Lo que espera que le digan los lectores

De esta obra, el escritor extremeño Jesús Sánchez Adalid dice que hay que leerla porque es una «novela bellísima y rigurosamente documentada sobre una de las mujeres más fascinantes del siglo de Oro», mientras que su autora declara que estaría satisfecha si los lectores, tras leerla, le dijesen que gracias a ella «han podido sentir el alma de la mestiza, ver a través de sus ojos, emocionarse con sus pérdidas y celebrar con igual ahínco sus victorias, tocar las piedras sagradas de los templos de Cuzco, saborear las primeras recetas mestizas, compartir intimidad con mujeres recias y fuertes que construyeron una nueva realidad, empaparse del mundo andino, pasear la España del XVI, descubrir las intrigas de la corte, y transportarse a todos esos mundos que alberga su espíritu, el universo mestizo». Que así sea.