El Pamesa Valencia se desprende de Rodilla, su jugador franquicia

El Pamesa Valencia anunció ayer la rescisión del contrato del base Nacho Rodilla, al que en 1999 encumbró como su jugador franquicia con un contrato vitalicio y del que ahora ha prescindido por decisión técnica.

Ha sido una amarga y enrevesada despedida para una relación modélica de casi diez años. Ambas partes han protagonizado un sonado desencuentro en los últimos días, lleno de medias verdades, malos entendidos y algunas mentiras, que tuvo su culminación el sábado por la tarde.

Juan Roig, presidente de la entidad valenciana, se presentó solo en la rueda de prensa en la que estaba previsto que junto al jugador diera la noticia de una desvinculación sorpresa.

RETIRADA DE CAMISETA

El club, que se confiesa dolido por haber apostado por esta decisión, anuncia que retirará y colgará la camiseta de Rodilla como homenaje y el jugador que sólo tiene palabras de agradecimiento, pero a nadie se le quita el sabor amargo de la boca.

Hace casi cuatro años, en noviembre de 1999, el Pamesa y Rodilla centraron la atención del baloncesto español al oficializar un acuerdo que convertía al base en el jugador franquicia del club.

Dijeron entonces que era un compromiso vitalicio, más tarde que era una ampliación de contrato hasta junio de 2006 y que le convertía en uno de los jugadores nacionales mejor pagados. Ahora podría irse al Caprabo Lleida.