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Copa del Rey Las consecuencias del histórico descalabro madridista.

Ultimatum a Pellegrini

La continuidad del técnico dependerá de lo que pase ante Getafe, Milan y Atlético.Los jugadores aún no se pueden creer haber caído frente al Alcorcón por 4-0.

Manuel Pellegrini tiene fecha de caducidad y tendrá que hacer muchos méritos para seguir agarrado al banquillo blanco. Si hubiera sido por Florentino Pérez, el entrenador hubiera saltado por los aires tras la humillación en Alcorcón. El presidente del Madrid nunca creyó en el extécnico del Villarreal. Ahora, el responsable del equipo blanco se la juega ante Getafe, Milan y Atlético. Un nuevo traspié precipitaría la situación y terminaría con el crédito, ya limitado, que el club ha dado al técnico.

La plantilla del Madrid ya no cree en su entrenador. Pellegrini perdió autoridad antes de comenzar el campeonato cuando el club le quitó los galones desde que puso el pie en el Bernabéu. El técnico chileno pidió que Robben y Sneijder siguieran en la plantilla, pero su solicitud fue desoída. Los jugadores comenzaron a llamarle "pelelegrini" y ahora los pesos pesados han bajado el pulgar, lo que deja al técnico al borde del k.o.

Anteriormente llegaron las críticas de algunos jugadores al juego del equipo. Benzema, Xabi Alonso, Kaká y Guti, entre otros mostraron su desacuerdo con la forma de jugar del equipo. La concentración previa al choque de Copa ha sido el último pulso de Pellegrini a los jugadores y parte de la explicación de la dimisión del equipo y la consiguiente derrota histórica.

El desmadre que rodea a este equipo tuvo el último episodio en Alcorcón cuando Guti mandó a hacer puñetas a Pellegrini para, posteriormente, abandonar el vestuario y sentarse solo en el banquillo tras hacerle una peineta al público que le increpaba. Guti llegó con dos horas de retraso al entrenamiento del domingo, lo que justificó por el cambio de la hora, una excusa difícil de creer porque de no haber cambiado el reloj hubiera llegado una hora antes al ensayo. Pese a ello, el 14 blanco fue titular ante el Alcorcón. Al final del encuentro, tras el calentón, pidió perdón a sus compañeros.

UN MAL SUEÑO El tremendo impacto de la goleada copera tuvo ayer su continuación. Algunos jugadores aún no se lo podían creer. "Cuando me desperté creía que había sido un sueño, pero no fue así. Perdimos 4-0 contra el Alcorcón. No sé qué pasó. El entrenador nos explicó muy bien las cosas, pero luego no sé qué ocurrió en el campo", confesaba Drenthe en Onda Madrid. Raúl Albiol tampoco se explicaba el descalabro. El central habló ante la prensa tras la sesión de ayer y aseguró que había pasado una mala noche.

"No he pegado ojo. Estamos tristes y jodidos. No entramos bien en el partido y nos faltó intensidad. En la primera mitad nos pasaron por encima y luego queríamos, pero no podíamos", declaró el defensa blanco, que confirmó la charla entre el técnico y los jugadores en el vestuario. El exjugador del Valencia añadió que el equipo "está a muerte con el entrenador, que intenta transmitirnos una idea que nos está costando asimilar porque cuando hemos ganado partidos se ha dicho que no jugábamos bien".

JUICIO EN EL BERNABEU El otro juicio al que tendrán que enfrentarse la plantilla y los jugadores será al público del Bernabéu. El sábado el Getafe de Michel visita el feudo blanco. Una derrota podría acelerar la descomposición del nuevo proyecto de Florentino, que quedaría al descubierto con la salida del técnico. Las siete incorporaciones: Ronaldo, Kaká, Benzema, Xabi Alonso, Raúl Albiol, Granero y Arbeloa se antojaban como la llave para intentar frenar al Barça. Se habló del triplete, de la Champions, cuya final se juega en el Bernabéu y ahora se es goleado ante un Segunda B.

Hasta Alfredo di Stéfano se sumó ayer a las críticas. El presidente de honor del club blanco mostró su desencanto por la derrota copera y mostró su confianza en que la temporada no sea un fracaso. "Muy mal. No tengo explicación. Cuando eres mejor tienes que demostrarlo en el campo. Al equipo le faltó gol y armonía. Ahora hay que tener tranquilidad y esperar que esta temporada no sea un fiasco", declaró el mítico exjugador.

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