La reunión telemática que tuvo lugar ayer entre los clubs de la LEB Oro, entre los que se encontraban representantes del Cáceres Patrimonio de la Humanidad, y la Federación Española de Baloncesto (FEB) acabó sin resultados palpables. La liga, parada desde hace más de un mes por la crisis sanitaria del covid-19, continúa sin tener futuro definido por una acumulación de motivos.

El principal es que sus propios integrantes no están de acuerdo en si concluir ya la competición sin ascensos ni descensos. Los intereses de cada uno quedaron bien escenificados en el encuentro: los equipos que han realizado fuertes inversiones quieren apurar las posibilidades de conseguir una plaza en la Liga Endesa, mientras que los de mitad de tabla hacia abajo prefieren dar todo por concluido y arrancar de cero en la 2020-21.

La FEB distribuyó un cuestionario en el que se preguntó a los componentes de la competición si preferían reanudar la liga o cancelarla y, en este último caso, con qué consecuencias.

El Carramimbre Valladolid indicó públicamente que defenderá que la primera posición que ocupaba cuando la LEB Oro se paró (y 19 de las 24 jornadas disputadas) le daría derecho al ascenso en el caso de que la liga no siguiese.

Otra posible vía que plantean equipos como el Breogán es, al modo que se está empezando a proponer en Segunda B y Tercera División de fútbol, disputar un ‘playoff’ express o una concentración con eliminatorias a un solo partido en la que se decidirían los dos puestos de ascenso. Paralelamente, tampoco se ha decidido qué pasará aún en la Liga Endesa, en la que se empieza a dar por hecho que no habrá descensos y mucho menos en caso de no conseguir reanudarse.

La postura del Cáceres está más cercana a lo que expresó su propio presidente, José Manuel Sánchez, hace unos días en este diario: «Me gustaría que la liga terminase ya», comentó abiertamente. En su directiva, más preocupados de las dificultades financieras que pueden reproducirse de cara al futuro, le respaldan en su gran mayoría. Sin embargo, hasta hoy el club no ofrecerá su versión sobre lo que se habló.

EL COMUNICADO FEDERATIVO / La FEB, que estuvo representada por su director general, Óscar Graefenhain; el secretario general, Gabriel Rodríguez, y la directora de Competiciones, Elisa Aguilar (faltó el presidente, Jorge Garbajosa) emitió un comunicado en el que no aclaraba demasiado. «Durante un encuentro que ha destacado por su buen ambiente, tanto la FEB como los propios clubes han expuesto sus posiciones, debatiendo sobre los diferentes escenarios que existen a día de hoy para el campeonato. Todo ello motivado por la situación de la pandemia cuya evolución, en estos momentos, nadie puede aventurar», indica.

En la nota se afirma que «ante las diferentes posiciones existentes tanto entre los clubs implicados como con la Federación, se ha fijado de mutuo acuerdo un calendario de próximas reuniones en las que se avanzará para encontrar un acuerdo mayoritario que permita resolver la temporada de forma satisfactoria para todos los estamentos del baloncesto español implicados en ella». La siguiente reunión sería el próximo lunes 20 a las 12.00 horas, ya con los cuestionarios respondidos por cada club en poder de la FEB.