Bienvenidas, triunfadoras

Partieron en la madrugada del jueves al viernes, a las cinco de la mañana, del muy placentino Parque de los Pinos. Regresaron al mismo lugar camino de tres días después, el domingo sobre las 20.00 horas, con la misión encomendada cumplida con absoluta solvencia. Allí les esperaban familiares y amigos, ávidos de felicitarles. Razones había. Y más que sobradas.

Un total de 12 personas iniciaron y concluyeron la gozosa aventura: 9 jugadoras y tres integrantes del cuerpo técnico. Entre ellos no estaban ni el preparador físico, Daniel Carreras, ni Carlos Pino, el segundo entrenador del Extremadura Miralvalle, que no pudieron disfrutar endirecto, por diferentes razones, en el triunfo del sábado en Tías, en Lanzarote (63-77), que dio al club placentino el billete definitivo para jugar la fase de ascenso a la Liga Femenina en Leganés a finales de la próxima semana.

Conducían las dos furgonetas el entrenador, Raúl Pérez, y Álvaro Estevez, como coordinador del club, como suele suceder en cada desplazamiento, en el que también se encontraba Fran Delgado, el delegado, pieza también clave, porque, insisten en el Miralvalle, el triunfo es de todo el colectivo. Este domingo, los y las héroes de Lanzarote se fotografiaron con todos los que quisieron para tener un recuerdo del eufórico regreso.

Allí llegaban cuatro jugadoras formadas en el Miralvalle: una junior, Lidia Francisco; otra senior de primer año, Lucía Moreno, y dos clásicas ya, Natalia Pizarro y Alicia Morales, la lideresa capaz de asombrar, como durante toda la temporada. Y todo ello a lo largo y ancho de 37,2 minutos en pista, siendo la que más está en pista de toda la Liga Femenina 2 y la que más asistencias (e inteligencia) reparte. En total, 4,81 pases de canasta por encuentro dentro de una estadística en una categoría en la que la pívot Princess Aghayere es la dominadora absoluta de las zonas, con 12 rebotes de media. Una semana más ha sido MVP, por supuesto.

Este martes, desde las 11 de la mañana, es el sorteo en la sede de la Federación Española de Baloncesto. En realidad, da igual qué rivales toquen y las posibilidades, dicen que escasas, de que todo culmine con algo increíble. Pero ahí está el Miralvalle. Ahí está el equipo de moda del deporte extremeño, ahí está el grupo en el que no se olvida nada. Tampoco de Andrea Cueva, la joven alero vallisoletana lesionada de gravedad que no ha podido participar en los últimos encuentros y de la que todas se acuerdan.