Mayoría abrumadora de suspensos en el Cáceres

BASES

Hansel Atencia

Posiblemente, el mayor fiasco. No por su rendimiento en sí, tendente más bien a lo irregular, sino por el papel de líder que se le había conferido y que nunca cumplió. Excesivamente individualista y sin conexión con el resto, en absoluto se pareció al jugador que enamoró a todos en Oviedo hace dos años.

El dato: 38,4% en tiros de campo.

Dani Rodríguez

Es una leyenda de la LEBOro y siempre se muestra compromiso, sufriendo por lo que sucedía a su alrededor, pero ya no está para grandes trotes. Y aún así jugó más de lo que en principio se había diseñado, mostrando flashazos de lo que un día fue. En el platillo negativo también está su gestión de un par de finales de partido.

El dato: Cumplió 40 años el 13 de febrero de este año.

Pablo Rodrigo

‘Combo’ de enormes cualidades al que, sin embargo, aún le queda mucho que mejorar.Casi nada le salió bien: tampoco estuvo fino cuando los partidos se pusieron apretados, intentó marcharse antes del cierre del mercado a Melilla, arrastró un problema en el hombro al principio y, lo más grave, se rompió la rodilla en la antepenúltima jornada.

El dato: Puede que le espere un año sin poder jugar.

Pablo Sánchez

Un año perdido. Su contribución se limitó a diez minutos en toda la temporada, atormentado por una lesión de menisco por la que tuvo que ser operado dos veces, ya que la primera no salió nada bien. Quizás todo hubiese sido distinto con él.

El dato: -7 de valoración en su único partido, ante Estudiantes.

Escoltas y aleros

Greg Gantt

Su primer tercio fue un espectáculo, enganchando un triple tras otro en posiciones imposibles. Aquello no podía durar y su paso al lado oscuro resultó durísimo, bajando porcentajes y sin aportar casi nada en otros aspectos del juego. 

El dato: En noviembre promediaba 15 puntos y acabó con 9,5.

Mike Nuga

La llegada de Nuga señalaba claramente que Gantt no daba para más, o que como mínimo se necesitaba una fuente más de anotación. En su primera experiencia europea se ha revelado como un jugador bastante útil, muy explosivo y decidido, aunque era difícil encajar en un contexto tan deteriorado. Está claro que tampoco es Kenny Hasbrouck.

El dato: Al igual que Balaban, se va de Cáceres con solo una victoria.

Gael Bonilla

La gran esperanza azteca resultó desesperante. Se trata de un ’3’ de unos detalles maravillosos, con fases que dominio total. Pero de repente... desaparece y nada más se sabe de él. Quizás sea lógico tratándose de un chico de 20 años que solamente había jugado en Liga EBA en lo que a competiciones federativas se refiere. Gastar una plaza de extracomunitario en él fue osado.

El dato: Solo ha anotado más de 10 puntos en dos partidos de la segunda vuelta(12 en la primera).

Pau Carreño

En principio iba a ser el undécimo hombre de la plantilla y las circunstancias le hicieron progresar en la rotación. Defiende muy bien, pero sus recursos ofensivos son limitados y eso le pesa. La típica pieza de vestuario siempre dispuesta a todo que deja felices a sus entrenadores por su entrega.  

El dato: 3,3 puntos y 1,3 rebotes en 13:08 minutos.

Lucas Sigismonti

Vinculado en el Lithium Iberia Sagrado, donde promedió 17 puntos, echó una mano en diez encuentros.

El dato: Solo tiró de tres (4 de 11).

ALAS-PÍVOTS Y PÍVOTS

Remu Raitanen

Quizás un buen complemento en LEBOro, pero desde luego no un titular. Siguiendo el tópico sobre los nórdicos, se temía que fuese un jugador excesivamente frío. Y lo cumplió. La llegada de Ashley Hamilton en su misma posición no supuso ningún revulsivo para él.

El dato: Dos años en LEBOro y dos descensos. 

Juanjo Santana

Compañero de Raitanen en Albacete, en Cáceres ha rendido menos, sobre todo en un aspecto que se consideraba clave en él: el triple. Resulta increíble que se haya quedado en un 10% (3 de 30). Se lesionó de gravedad en la primera vuelta y ya no volvió.

El dato: La temporada pasada hizo un 35,9% en triples (33 de 92).

Ashley Hamilton

Con la baja de Santana se incorporó a Hamilton, que cumplió al menos estadísticamente y elevó el listón del carácter en un equipo que ya por entonces (Navidad) padecía una clara abulia. Pero el objetivo último, que era ser competitivos con una referencia más sólida en la posición de ‘4’, no se hizo realidad. 

El dato: Mejor valoración media del equipo (10,6).

Dikembe André

Caso similar al de Gael Bonilla: demasiado riesgo conferirle papel de titular y ficha de extracomunitario cuando, en su caso, era la primera vez que jugaba en Europa. Bien en el rebote y cuando le llegaba el balón muy cerca del aro, puede ser un ‘5’ útil a la espera de caer en un sitio más propicio.

El dato: Décimo mejor reboteador de la liga (6,1).

Vaidas Cepukaitis

Pésimo. No llegó a concluir la temporada porque, de haber llegado a los 25 partidos disputados, hubiese habido que renovarle. Aportó muy poco, pese a su gran visión de juego y amplia envergadura.

El dato: 41,7% en tiros libres, segundo peor de la liga.

Darko Balaban

Aunque mejoró a Cepukaitis (tampoco era difícil), ya no es un ‘5’ determinante. Se ganó el papel de malo de la película en la recta final, cuando resbaló poniéndose en el mercado públicamente horas después de descender.

El dato: Solo metió más de 10 puntos en uno de los últimos ocho partidos.

Dani García Casarrubios

Otro vinculado (7 partidos y 16 minutos en total), pero más tímido que Sigismonti a la hora de tirar.

El dato: Entró len el acta varios partidos para completar el cupo de jugadores de formación, pese a que estaba lesionado.

Santi Caballero

Junior del San Antonio, él sí terminó con una sonrisa. 

El dato: Anotó en Sevilla en su debut la última canasta de la temporada.

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