Francia sugiere que el BCE no debería elevar los tipos de interés

El mensaje no ha sido directo, pero sí fácilmente inteligible: Francia pide al Banco Central Europeo (BCE) que no suba los tipos de interés a medio plazo, pese a las tensiones inflacionistas. La ministra de Economía francesa, Christine Lagarde, solicitó ayer que la institución priorice el crecimiento económico sobre el control de la inflación.

En una entrevista en el International Herald Tribune , Lagarde reiteró la corriente crítica que desde París se sigue contra la política del BCE desde que Nicolás Sarkozy llegó al Elíseo. El Gobierno francés parece dudar de la independencia de la institución presidida por Jean-Claude Trichet al cumplir su mandato primordial de mantener la estabilidad de precios en la eurozona.

"Si tenemos que elegir entre un alto nivel de inflación y un alto crecimiento, o un nivel estable de precios con un menor crecimiento, yo ciertamente prefiero una inflación temporalmente más elevada y un crecimiento más alto", afirma Lagarde. Estas declaraciones se producen apenas días antes de que el consejo de gobierno del BCE mantenga su primera reunión del año, en la que las perspectivas apuntan que de nuevo se mantendrán los tipos inalterados en el 4%.

Las apuestas por recortes de tipos a corto y medio plazo sufrieron un revés después del mensaje de Trichet, tras la última reunión del BCE, en la que subrayó que la institución intentaría respaldar el crecimiento de la eurozona siempre que no ponga en riesgo el control de precios.

Al debate de crecimiento económico versus precios se sumó ayer en EEUU el gobernador de la Reserva Federal de Filadelfia y miembro alterno del Consejo del Mercado Abierto de la Reserva Federal (Fed), Charles I. Plosser, que reiteró sus previsiones de que el crecimiento económico de EEUU se resentirá en los primeros meses del 2008, mientras que aumentan los riesgos relacionados con las presiones inflacionistas, lo que llevaría a la estanflación.