Bankia ha decidido abrir un proceso para devolver toda lainversión a los accionistas minoristas que acudieron a la salida a Bolsa en el 2011 más intereses, según ha anunciado este miércoles la entidad.

En concreto, Bankia devolverá a los accionistas minoristas el importe íntegro de su inversión inicial a cambio de la devolución de las acciones a la entidad. En el caso de que hayan vendido las acciones, se les abonará la diferencia entre lo invertido y lo obtenido con la venta de los títulos.

En ambos casos se abonarán unos intereses compensatorios del 1% anual por el tiempo transcurrido hasta la restitución de la inversión, según ha señalado la entidad, que ha subrayado que devolverá el dinero de forma "ágil, rápida, sencilla, gratuita y con total seguridad" a los inversores minoristas que adquirieron acciones de la entidad en su salida a bolsa en el 2011 sin necesidad de cumplir ninguna otra condición, y sin los costes ni tiempo de las reclamaciones judiciales y extrajudiciales.

Ante la nueva situación creada por la jurisprudencia sentada por las decisiones del Tribunal Supremo de rechazar dos recursos presentados por Bankia y sin perjuicio del desarrollo del procedimiento que se sigue en la Audiencia Nacional, la entidad ha decidido articular un proceso que permita a los inversores del tramo minorista recuperar su inversión de forma sencilla y rápida.

El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha explicado que a la vista de los últimos acontecimientos, la entidad ha tomado la decisión de abrir un proceso que permita a todos los accionistas minoristas que acudieron a la salida a bolsa de Bankia en julio del 2011recuperar toda su inversión más intereses.

1.840 MILLONES

En su comunicado, Bankia recuerda que en la salida a bolsa se captaron a través del tramo minorista 1.855 millones de euros, de los cuales 255 se vendieron antes de marzo del 2012, por lo que esos inversores "o bien tuvieron pérdidas mínimas o, incluso, ganaron dinero". Por todo ello, la entidad considera que los 1.840 millones de euros yaprovisionados son más que suficientes para hacer frente a todas las solicitudes, tanto de lo invertido por los pequeños accionistas como de los costes de las demandas judiciales ya abiertas.