Reunión de ministros de Finanzas

Bruselas espera recibir en un mes unos presupuestos austeros de cada país para 2024

Las cuentas para 2024 deben ser "cautas, restrictivas y en línea con los cambios que se están haciendo en la política monetaria" para contener la inflación

La presidenta del BCE, Christine Lagarde (c); el presidente del Eurogrupo, Paschal Donohoe (i), y el comisario de Asuntos Económicos, Paolo Gentiloni, tras la reunión del Eurogrupo en Santiago de Compostela.

La presidenta del BCE, Christine Lagarde (c); el presidente del Eurogrupo, Paschal Donohoe (i), y el comisario de Asuntos Económicos, Paolo Gentiloni, tras la reunión del Eurogrupo en Santiago de Compostela. / EFE

Rosa María Sánchez

Con distintos timbres de voz, pero con la misma intención. El presidente del Eurogrupo, Pascal Donohoe, el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, y la presidenta del BCE, Christine Lagarde, han recordado este viernes a los estados miembros de la zona euro que preparen unos presupuestos austeros y restrictivos para 2024, antes de someter sus respectivas propuestas al examen de la Comisión Europea en el plazo de un mes, antes del 15 de octubre.

Las cuentas para 2024 deben ser "cautas, restrictivas y en línea con los cambios que se están haciendo en la política monetaria" para contener la inflación, ha dicho el presidente del Eurogrupo, Pascal Donohoe, en Santiago de Compostela, en la rueda de prensa posterior a la reunión informal de los ministros de Finanzas que la Presidencia Española de la UE ha convocado en la capital gallega.

Pese a la dificultades para formar gobierno y al incierto proceso de investidura de un presidente por parte del Congreso de los Diputados en las próximas semanas, España (con un Gobierno en funciones o no) también deberá presentar en Bruselas antes del 15 de octubre un plan presupuestario que, con toda seguridad, incluirá una prórroga de las actuales cuentas del Estado. La Comisión Europea vigilará si ese plan cumple las directrices de austeridad lanzadas desde Bruselas.

Política fiscal

Un día después de la décima subida de tipos acometida por el Banco Central Europeoen los últimos 14 meses, el comisario Gentiloni ha explicado que "para apoyar los esfuerzos del BCE para contener la inflación, la política fiscal debe ser restrictiva" y contribuir a reducir la deuda y el déficit público. "No significa menos inversión, pero sí menos ayudas a la energía y focalizar las medidas hacia los colectivos más vulnerables", ha subrayado el comisario italiano, en una nueva apelación a los estados miembros para que desmantelen sin demora los estímulos que pusieron en marcha los gobiermos para compensar los efectos de la pandemia, primero, y los de la crisis energética, después.

Gentiloni ha elogiado el impulso de España para lograr un "buen acuerdo" sobre unas nueva reglas fiscales antes de que acabe el año. Aunque no se ha presentado ningún texto nuevo en Santiago de Compostela, ni se espera que se adopte ninguna decisión al respecto este sábado, en la reunión informal del Ecofin, Gentiloni ha confiado en lograr "algunos progresos" que permitan seguir realizando avances.

La vicepresidenta en funciones Nadia Calviño sí ha expresado su propósito de sacar adelante "un calendario ambicioso" con el objetivo de tener un acuerdo antes de fin de año, bajo Presidencia española de la UE, para tener cuanto antes un nuevo marco de reglas fiscales con "sendas estables y graduales" de reducción de la deuda pública que, al mismo tiempo, permitan avanzar en inversiones de la agenda europea verde y digital.

La Presidencia española pretende presentar una primera propuesta de acuerdo en la próxima reunión formal de los ministros Finanzas, que tendrá lugar en Luxemburgo el 17 de octubre.

Tipos de interés

"La política presupuestaria ha de ser ligeramente restrictiva y reducir la deuda y el déficit. Lo que Europa necesita es más inversiones públicas y privadas en la transición verde y digital", ha sumado la presidenta del BCE, Christine Lagarde.

Lagarde ha tenido ocasión de defender ante los ministros de Finanzas del euro la nueva subida de tipos de interés decidida el día anterior por el BCE. "Creo que se ha comprendido muy bien. No hubo ninguna pregunta o cuestionamiento de nuestra decisión", ha dicho la presidenta del BCE en la rueda de prensa posterior a la reunión del Eurogrupo.

Lagarde ha vuelto a explicar que tras situar el precio oficial del dinero en el 4,5%, "los tipo de interés han llegado a unos niveles que, mantenidos durante un periodo de tiempo suficiente, deben contribuir a devolver la inflación al objetivo del 2%". Ahora bien, esa es "la visión de hoy". Si los datos de inflación empeoran, el BCE volverá a calibrar cuál es el nivel adecuado de tipos de interés y por cuánto tiempo. Por eso, Lagarde rehúsa responder a la pregunta de si los tipos de interés ya han llegado a la cima. "Lo que les puedo asegurar es que vamos a domesticar la inflación", ha dicho.