El tripartito únicamente consigue movilizar a 20.000 soberanistas

El 29º aniversario de la aprobación del Estatuto de Gernika volvió a poner en evidencia las profundas diferencias existentes entre los partidos vascos en torno al modelo político, acentuadas por la necesidad de marcar un perfil propio ante las elecciones del próximo mes de marzo.

El tripartito (PNV, EA y EB) y Aralar celebraron un acto colorista para reivindicar la celebración de la consulta soberanista prohibida por el Tribunal Constitucional, a la misma hora que el PSE defendía el actual texto estatutario y apostaba por su actualización desde el consenso.

Más de 20.000 personas secundaron una reivindicación con el lema Hitza hitz (la palabra es la palabra), desarrollada en seis localidades en las que los participantes formaron las palabras "Euskal Herria. Bakea bai. Erabakia bai" (Euskal Herria. Paz sí. Decisión sí). Asimismo, estos actos estaban convocados por el Ejecutivo vasco y Aralar para el mismo día en que debía celebrarse la fallida consulta.

Los convocantes de estas protestan se mostraron "muy satisfechos" a su término, y las valoraron como un paso hacia el reconocimiento del "derecho a decidir". La portavoz del Gobierno vasco, Miren Azkarate, dijo que el derecho de autodeterminación y la consulta popular "han venido para quedarse".

FORMACION DE PALABRAS Decenas de cargos electos se sumaron al acto, encabezados por el lendakari, Juan José Ibarretxe, varios miembros de su Gobierno, la presidenta del Parlamento vasco y los diputados generales de Alava, Vizcaya y Guipúzcoa. También acudieron los expresidentes vascos Carlos Garaikoetxea y José Antonio Ardanza, y los líderes de PNV, EA, EB y Aralar.

Los actos comenzaron en Gernika, donde cientos de ciudadanos formaron con paraguas la palabra "Euskal" y posteriormente se fueron dibujando las palabras "Herria", "Bai", "Bakea" y "Erabakia" en Amorebieta, Durango, Urkiola y Legutiano, para cerrar la reivindicación en Vitoria.

En el acto final, cuatro parlamentarios de estas formaciones leyeron un manifiesto en el que se rechaza que el Gobierno central y los tribunales españoles, "desde la unilateralidad y el principio de veto", mantengan las estructuras políticas actuales con el argumento de que las soberanías española y francesa son las únicas fuentes de legitimidad. El documento, leído en castellano, euskera, francés e inglés, proclamaba la existencia de Euskal Herria ante el mundo "como un pueblo asentado en siete territorios ubicados en dos estados". Además de exigir el fin de ETA y denunciar "los excesos legislativos y judiciales", el tripartito y Aralar manifestaron su voluntad de impulsar "un proceso de diálogo sin límites ni exclusiones". Los socialistas vascos conmemoraron en Bilbao el 29º cumpleaños del Estatuto.

Su secretario general, Patxi López, anunció que, si es elegido lendakari, promoverá, junto a los demás partidos, "la actualización y reforma del pacto estatutario" desde el consenso y conforme a la Constitución.

En un acto desarrollado ante el museo Guggenheim de Bilbao, López explicó que esa reforma culminaría "con un referendo confirmatorio de la sociedad vasca basado en las necesidades reales del país". Frente al mensaje lanzado a la misma hora en Vitoria, los socialistas defendieron el Estatuto de Gernika como "el instrumento que garantiza nuestra capacidad de decidir".