NEGOCIACIÓN INVESTIDURA

Génova pide a sus CCAA contener el debate de la condonación de deuda y centrarse en Puigdemont

La dirección nacional insiste en que la crítica debe ser la bilateralidad de la negociación con el único objetivo de beneficiar a Cataluña y pide "no caer en la trampa" de que habrá compensación para todas

"En este momento hay que seguir mirando al alcance de la amnistía y a Puigdemont", repiten

Alberto Núñez Feijóo se reúne con los portavoces del PP en el Congreso, el Senado y el Parlamento Europeo.

Alberto Núñez Feijóo se reúne con los portavoces del PP en el Congreso, el Senado y el Parlamento Europeo. / DAVID MUDARRA.

Paloma Esteban

La tensión que Junts ha añadido en la recta final de las negociaciones para la investidura a Pedro Sánchez tiene réplicas en todos los partidos políticos. El PP sigue estudiando distintas vías para actuar ante el acuerdo alcanzado entre PSOE y ERC, pero se mantiene en alerta por lo que aún pueda ocurrir con Carles Puigdemont. Génova escenificó una reunión de urgencia este viernes por la mañana para coordinar una respuesta del partido y, aunque no desveló en qué consistirá “la respuesta política e institucional”, fuentes de la dirección aseguran que habrá acciones parlamentarias en el Congreso y el Senado, y también una respuesta específica europea.

La presencia de la portavoz en el Parlamento Europeo, Dolors Montserrat, en la sede nacional, no era casual. El PP considera que “en el escenario europeo” puede jugarse mucho de lo que Sánchez pacte con los partidos independentistas. Muchas miradas se volvieron al acuerdo alcanzado entre socialistas y republicanos para una condonación parcial de la deuda de la Generalitat con el Estado tras haberse acogido al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) por importe de 15.000 millones de euros.

El perdón de la deuda llevaba semanas en el debate público porque ERC lo puso encima de la mesa. Y las comunidades autónomas gobernadas por el PP lo sabían. Muchas son muy sensibles al asunto, sobre todo las que menos deuda han contraído con el Estado. Hasta el punto de que ya dejaron claro en el Senado que estudiarían las vías legales necesarias para frenarla. Pero el hecho de que Hacienda afirmara que el mecanismo pactado con los independentistas servirá también para compensar al resto de autonomías abre un agujero en la postura de los populares.

Algunas comunidades evitaron fijar una posición concreta insistiendo en que toca esperar a conocer “la letra pequeña”, y denunciando, eso sí, la desigualdad entre ciudadanos que implica ese pacto. Es el caso de la Región de Murcia o la Comunidad Valenciana. Otras como Andalucía sacaron la calculadora para evidenciar que existen agravios mayores. Y también las hubo como Castilla y León, que salieron en tromba contra el perdón de la deuda con un discurso muy duro.

En Génova, que mantienen contacto directo con todos sus territorios, no esconden que el objetivo ahora pasa por aplazar ese debate. Al menos, contenerlo. “No se puede caer en la trampa. Quieren convencernos de que es un mecanismo para mejorar la financiación de todas las autonomías. No es verdad. Es un pacto con Cataluña y lo demás es disfrazarlo. No toca ahora centrarse en eso, sino en el alcance de la amnistía y en lo que todavía va a pedir Puigdemont”, resumen fuentes de la dirección.

Así lo han trasladado internamente y es también el mensaje por el que apostarán en los próximos días. El traspaso de Rodalies (Cercanías en Cataluña), igual que la condonación de la deuda, son aspectos que el PP critica muy duramente, entre otras cosas porque el propio Gobierno negaba tajantemente que pudieran ser condiciones para esta negociación. Pero consideran que sería “un error” entrar en el debate territorial de la quita de deuda en este momento y que, aunque los presidentes autonómicos deben defender los intereses de sus ciudadanos, “la presión debe seguir centrada en el precio que Sánchez paga por la investidura”.

En Génova están convencidos de que en estos días ha calado la idea de que el PSOE “está comprando” los votos “con todo lo que puede”. En el caso de los republicanos catalanes ha quedado muy claro gracias a la comparecencia de Oriol Junqueras. Pero siguen pensando que Puigdemont "no se quedará atrás" y que la rivalidad que mantiene con ERC “le obliga a subir el precio”.

“Ojo con el alcance que aún puede tener la amnistía y con lo que el PSOE está dispuesto a incluir”, afirman en la cúpula conservadora. “Y con lo que todavía podemos desconocer”, añaden los dirigentes más cercanos a Feijóo. El PP siempre ha tenido en la cabeza la “imprevisibilidad” de un personaje político como Puigdemont. Consideran que el PSOE se confió pensando que para Junts lo más importante era la fotografía con el número tres de Ferraz, Santos Cerdán. “Es un precio muy alto para el PSOE, pero no lo es para Junts, que aspira a más”, aseguran en la dirección popular.

Precisamente, el PP tiene claro que emprenderá una ofensiva por tierra mar y aire contra la ley de amnistía en cuanto se registre en el Congreso. El último movimiento en el Senado, modificando su reglamento para poder retrasar al máximo la tramitación, es solo un ejemplo.