Carlos Eugenio García, que mañana se sube al balcón para pregonar el Carnaval, lleva casi tres décadas participando en la fiesta. Su pregón es un reconocimiento a Yuyubas, comparsa a la que pertenece desde hace más de 20 años.
--¿Qué cree que va a ser más dificil dar el pregón o desfilar por la calle en el carnaval?
--Sin duda, dar el pregón. Parece increíble que para algo que dura unos minutos me tenga que estar tantas horas preparándolo ante los folios en blanco.
--¿De qué va a ir disfrazado cuando pronuncie el pregón?
--Voy a hacer un homenaje a la comparsa Los Yuyubas y por eso luciré el traje que llevaremos este año en el desfile de carnaval.
--¿Va a improvisar o a leer un texto preparado?
--Lo que sí puedo adelantar es que voy a llegar a la plaza de España de forma espectacular. Nadie debe perdérselo. Es una sorpresa, pero os aseguro que voy a aparecer como una estrella.
--¿No cree que las murgas se preparan demasiado para ganar y menos para divertirse?
--El espíritu competitivo es innato al ser humano y a medida que pasan los años va creciendo. Pero creo que al final el objetivo de todo el mundo es divertirse y pasar un rato agradable.
--¿Desde cuando tiene espíritu carnavalero?
--Mi comparsa tiene 21 años, aunque me disfrazo desde los años ochenta, desde los mismos orígenes del carnaval actual. Entonces me hacía un disfraz popular cogiéndole a mi abuelo la boina y el bastón, algo que le cabreaba. Siempre he salido de carnaval.