En estos últimos años se ha abierto un enorme campo dentro de las lecturas juveniles a base de películas basadas en obras literarias que han hecho que los jóvenes, y los no tan jóvenes volvamos a la literatura de ciencia ficción y de aventuras con verdadera pasión. Obras más antiguas como 'El señor de los anillos', 'El hobbit' han dado lugar a películas con un gran éxito en taquilla. Otras mucho más modernas como 'La saga Crespúsculo', 'Juego de tronos' o 'Los juegos del hambre', dan pie a películas o series de televisión con quizá el mismo éxito o incluso superior. Todo ello nos lleva a una reflexión importante. Los libros siguen siendo la base de las películas, aunque en muchas ocasiones, no son un fiel reflejo de lo que en papel tenemos, si siguen el mismo camino, de lo cual debemos enorgullecernos.

Este es un camino que, lejos de estar desandado, cada vez se está andando con más fuerza, especialmente dentro del público juvenil, que, a base de ver esas películas, se está aficionando a la lectura de las obras de las que proviene, bien sea en papel, bien en formato electrónico, amantes como son la juventud actual de las nuevas tecnologías y métodos de lectura.

Nuestro país, lejos de ser una isla en la lectura, parece que vuelve con este tipo de obras a repuntar la lectura entre los más jóvenes (contando como más jóvenes la edad de hasta 25 años) que casi nunca habían cogido un libro disfrutar de su contenido, salvo los obligatorios de las escuelas e institutos. Destacan, además de los títulos antes mencionados, las obras de Federico Moccia , que han dado lugar a al menos que yo recuerde, a tres películas dedicadas fundamentalmente a este público tan especial y a la vez, tan exigente. No olvidemos que, el hecho de no estar habituados a leer hace que estas obras sean el punto inicial para que estos chicos y chicas se vuelquen en el contenido de los libros como arma de entretenimiento por encima de otros que hoy en día son más habituales, llámense ordenadores, redes sociales, videojuegos y similares.

Hemos de enorgullecernos de que nuestras cadenas de televisión apuesten por esta clase de películas y series para su producción, con un fin indudablemente comercial, claro está, es su negocio, pero a la vez, hacen que obras que podrían pasar desapercibidas para esta generación de chavales, sean vistas con interés. Recordamos que actualmente se emite 'El capitán alatriste', basada en las obras homónimas protagonizadas por este personaje creado por Arturo Pérez Reverte , o la serie recientemente finalizada de Víctor Ros , basada en la obra de Jerónimo Tristante con un cierto aire decadente por la época que nos muestra, pero con muy claras reminiscencias a los clásicos de Conan Doyle , del que toman una buena parte de su esencia. Todo ello está haciendo que los libros, en papel o en formato electrónico da igual, vuelvan a ser lo que hasta ahora habían sido, un magnífico medio de entretenimiento y ocio entre los jóvenes, y debemos animarles a ello, aprovechando el tirón que para ellos supone la existencia de estos filmes, para que descubran los libros.