El aclamado «milagro» extremeño para reducir las cifras de contagios y los avances en la relajación de las restricciones afianzaron la situación del mercado laboral en el mes de marzo (tradicionalmente bueno) con un descenso del desempleo en 1.533 personas, que supone dos meses ya de descensos, y sitúa la cifra total de parados por debajo de los registrados en marzo del 2020, cuando estalló la pandemia. Entonces había 112.600 parados y este marzo ha concluido con 112.405 personas sin trabajo, lo que convierte a Extremadura en la única comunidad con mejores cifras que al inicio de la pandemia (en España el paro cayó un 1,48% en el último mes pero la tasa interanual se incrementó un 11,3% con 3,9 millones de parados en total). Este dato, en todo caso, no incluye a los trabajadores que se encuentran aún en suspensión de empleo o reducción horaria por un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE). En Extremadura hay 6.903 empleados afectados aún por algún tipo de ERTE, aunque la cifra ha caído un 45% respecto a los más de 12.000 que había el pasado mes de febrero.

Por sectores, el servicios fue el que más incidió en la reducción de las listas de desempleados (-1.212) fundamentalmente en el turismo y le comercio; seguido de la construcción (-581), que atraviesa un pico de actividad en gran medida por el empleo asociado a las plantas solares. En el otro extremo, el paro repuntó en la agricultura y entre las personas que no han trabajado nunca. Además, la brecha de género mantiene su tendencia y las mujeres ocupan casi siete de cada diez puestos en las listas de desempleo en Extremadura.

Con todo ello, el director general de Planificación y Evaluación de Políticas Activas de Empleo, Jesús Seco, hizo ayer un balance «moderadamente positivo» por la confluencia de la reducción del paro y los ERTEs y el incremento de la afiliación. «Es in dato moderadamente positivo que nos indica una luz y nos sitúa en la senda de la normalidad», afirmó. Resaltó además que Extremadura es «la única región que presenta mejores cifras que al inicio de la pandemia», lo que a su juicio explica el comportamiento del mercado laboral extremeño en el último año, asociado al nivel de restricciones: el paro subió en abril, bajó después hasta el mes de agosto y a partir de ese momento empezó a subir hasta enero.

La Confederación Regional Empresarial Extremeña (Creex) vinculó la mejor respuesta de Extremadura a la crisis económica por el covid a la estructura del tejido productivo de la región (poco peso del turismo y la industria manufacturera) y se refirió a los casi 7.000 trabajadores que aún están en ERTE y cuyos puestos «penden en muchos casos de un hilo, y dependerá de lo que tarde en volver y consolidarse la recuperación económica», según el secretario general de la Creex Javier Peinado. Recordó que, según sus estudios, el 2021 «no será un buen año» y lamentó que «la vacunación no va al ritmo deseado» y que habrá que evaluar ante la recuperación «cómo ha quedado de dañado el tejido productivo».

Con la mirada en Europa

Los sindicatos por su parte recuerdan que el mes de marzo es un mes tradicionalmente bueno para el empleo y piden que los fondos europeos sean el motor de la innovación y el empleo de calidad.

UGT alertó de que «4 de cada 10 contratos siguen teniendo menos de 15 días de duración», advirtió de la necesidad de «continuar con el sostenimiento de las rentas de los trabajadores a través de los ERTEs» y reclamó la necesidad de derogar la reforma laboral «para poder garantizar que la recuperación se hace sobre unas bases sólidas» a las que pide ligar «el correcto uso» de los fondos europeos del Plan de Recuperación.

Por su parte CCOO considera que el problema de «la precarización del empleo solo se puede resolver impulsando los sectores que crean empleo estable como la industria y con cambios en la normativa laboral que promuevan la contratación de calidad y con condiciones dignas». Para ello reclama al Gobierno «que retome la agenda social» y «acelere la vacunación».

3.644 contratos indefinidos

La temporalidad sigue afectando a nueve de cada 10 contratos que se firman en Extremadura pero el mes de marzo recogió un importante repunte en el empleo indefinida, con 3.644 contrataciones bajo este modelo, lo que supone un incremento del 42% respecto al mes anterior y la cifra más alta para ese mismo mes desde el 2005. La cifra está acompañada en todo caso por un incremento también en el empleo temporal en el mismo periodo (36.104 contrataciones, 7.600 más ) y como consecuencia el incremento del volumen general de contratos con 39.748 (+9.594).

La afiliación también se incrementó en el último mes con 1.908 personas más que en febrero (+0,5%) y una afiliación media de 389.948 personas. En términos interanuales, el número de afiliados registró un aumento de 3.611 personas (+0,94%). A nivel nacional la afiliación se incrementó respecto a febrero (+0,38%) pero cayó en la comparativa con el mes de marzo de 2020 (-0,45%).

PSOE: «Es la única región que reduce parados»

El PSOE extremeño destaca que Extremadura sea «la única comunidad autónoma que reduce sus desempleados en los últimos doce meses», con «un mejor comportamiento» que la media nacional, en palabras de la portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Lara Garlito. Subrayó la gestión de la pandemia en ese «equilibrio entre economía y salud» y las numerosas ayudas del Gobierno central y el autonómico para amortiguar los efectos.

PP: «Las mujeres son las grandes damnificadas»

«Hoy hay 634 autónomos menos en Extremadura que en marzo de 2020 y hay 2.420 extremeñas más en paro que en marzo de 2020», apuntó la portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Cristina Teniente sobre los datos del paro. Para el PP, junto a las mujeres y los autónomos, los agricultores son los grandes damnificados. Alertó además de que la realidad del sector servicios, comercio y turismo «dibuja todos los días un panorama nada optimista».

CS: «Hay que rebajar el paro estructural»

«El paro estructural es a todas luces es incompatible con una región de progreso y de futuro», señaló la diputada del Grupo Parlamentario Ciudadanos Marta Pérez, que también se refirió al incremento en la brecha de género y a la inquietud de los trabajadores en ERTE, sin saber qué sucederá cuando se acaben las prestaciones excepcionales articuladas por la pandemia. Apeló una vez más a la oportunidad que los fondos europeos representan.

Unidas por Extremadura: «Es difícil empeorar algo ya muy debilitado»

Para la portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, que Extremadura sea la región con menos destrucción de empleo se explica porque su mercado laboral «estaba quebrado». «Es muy difícil que se destrozara algo que ya estaba bastante debilitado». Reconoció el esfuerzo en inversión de los Gobiernos central y autonómico para «parar la sangría en el empleo» pero alertó de que «el que se está creando es precario y temporal».