«...dada la previsible duración de la vista a celebrar en este proceso, se acuerda dejar sin efecto el señalamiento del día 27 de abril de 2021, y se convoca nuevamente para el día 18 de junio de 2021, a las 9.30 horas». Es la causa por la que el juicio que iba a tener lugar este martes en Zafra para resolver definitivamente la custodia de dos menores ha quedado suspendido y no se celebrará hasta dentro de dos meses. 

Detrás del mismo hay una compleja historia y un periplo judicial que empezó en 2016. Se trata del caso de Sara, la extremeña sobre la que se ha creado la campaña de apoyo ‘Mamá está castigada’. La acción la ha promovido la asociación ‘Mujeres libres, Mujeres en paz’. 

El «calvario», como ella misma lo define, empezó en ese año 2016. Fue a su médico de cabecera a la primera revisión por su segundo embarazo y fue el propio centro de salud quien puso la denuncia por violencia de género al ver el estado en que ella se encontraba. Pero esa denuncia se archivó. Desde entonces ha vivido un duro camino que terminó con la denuncia por secuestro de las dos niñas por parte de su expareja con una condena (que está recurrida) de cuatro años de cárcel.

Sara lleva dos años sin tener contacto con sus hijas; hasta el 18 de junio no habrá novedades sobre el caso.